Te Reto.[En Edición]

[Capitulo 6]

Alaina.

No sé porque he accedido a ir a ese lugar con Edmond a penas si lo conozco y con otras personas a las cuales no conozco para nada, ese simple hecho me pone los nervios de punta.

¿Jardín Botánico?, ¿En qué estaba pensando?

Y esa es la respuesta, no lo estaba haciendo.

La verdad nunca he ido a uno, pero no se si fue buena idea acceder a ir.

Me limito a borrar el nerviosismo de mi cabeza y a caminar hasta mi cama, tomo mi celular entre mis manos, luego de haber pasado un largo rato sin manipularlo y llamo a mi madre.

El celular suena al menos unas tres veces hasta que escucho la familiar y cálida voz de mi mamá...

–¿Cariño?, ¿Todo esta bien?

La típica pregunta que siempre me hace cada vez que hablamos, me hace sonreír.

—Si mamá.— Respondo inmediatamente para relajarla y me cruzo de piernas en forma de indio sobre mi cama para estar más cómoda.— Estoy bien. ¿Tú cómo estás?— Pregunto.

—Estoy bien cariño.– La escucho y puedo imaginarla con su hermosa sonrisa hablando a través de la línea telefónica.— ¿La universidad que tal? — inquiere con curiosidad.

—Todo bien la verdad, algo agotador.— Respondo sinceramente.

No le puedo ocultar a mi madre el simple hecho que en lo que va de semana, mis neuronas se están quemando, debido a toda las tareas que me han asignado.

Hablamos durante un largo rato y no puedo evitar extrañarla, siempre hemos sido ella y yo, debido a que mi papá se fue con otra mujer y nos abandonó cuando yo a penas era una niña.

¿Cómo una persona puede abandonar a su familia y dejarla a su suerte?

¿Cómo puede pensar en cuidar a una nueva familia si no tuvo el mínimo cuidado con la anterior?

Son cosas que nunca podré responderme. Cuando tenía 16 fui la única chica que no estuvo acompañada de sus dos padres en la graduación, recuerdo haber visto a mi padre en pocos de mis cumpleaños y lo poco que recuerdo es verlo sonriendome de una manera forzada al tener el compromiso de asistir y me duele de una manera sobrenatural el hecho de no tener un bonito recuerdo con él. No por el hecho que no estuviera en mi graduación o en ninguno de mis cumpleaños, más bien por el hecho que no estuvo cuando más lo necesité.

Cristina Smith es la mujer más fuerte que conozco y no lo digo simplemente por ser mi madre, ha sido siempre independiente desde que mi padre se fue, ella se ha encargado de darme todo, jamás me ha faltado nada y se lo agradezco, joder, le debo todo a ella y por eso la amo tanto.

~~~♥~~~

Los días de la semana pasaron extremadamente rápido, no puedo creer que ya sea viernes y siento que a penas voy procesando el día Lunes. En lo que va de semana he conocido a muchas chicas y chicos, debido a que Britany recuerda los nombres de las personas, como si su vida dependiera de ello.

Me presentó con su grupo de amigos y a decir verdad todos son muy agradables.

El grupo de Britt consiste en tres chicos.

Jack, William y Logan.

Y dos chicas

Britany, Camila y ahora yo.

Estamos sentados en una de las mesas de la cafetería hablando trivialidades y pensando en que haremos mañana, bueno, ellos hablan de que harán mañana y yo solo me encuentro escuchando todo y jugando con la pajilla de mi jugo.