Alone • Shikamaru Nara x tu •

12

Ya casi llego espérame un poco más, pronto estaré junto a ti.
En el bosque reinaba el silencio, era aterrador para alguien que esperaba la llegada del que juro protegerlo, Shikamaru estaba sentado bajo un árbol ocultando su rostro en sus rodillas con su cerebro creando diferentes escenarios donde la castaña moría por culpa de él, se sentía debilitado y sus manos no dejaban de temblar, se repetía una vez tras otra que si ella moría él jamás estaría con alguien en una relación, que vengaria su muerte con sus propias manos, odiaba a Orochimaru y a su séquito, se odia a él por no ser tan fuerte, por no tener suficiente chakra para proteger a la chica de la cual estaba enamorado pero podía respirar un poco por que sabía que esa niña era fuerte, los que deberían estar ocultos y temblando tendrían que ser esos ninjas del sonido pero en cambio el que estaba oculto era él, suspiro fastidiado intentando apagar su cerebro cuando escucho crujir las hojas secas que estaban en el suelo, se levantó como pudo agarrando su kunai con la respiración irregular y mucho dolor en su cuerpo intento pensar en alguna cosa que le sirva de ayuda pero se dejó caer cuando escucho una voz familiar.

- Shikamaru ¿Dónde estás? - suspiro aliviado - Oye ¡Bakamaru! - frunció el seño.

- ¿Cómo me llamaste, __-baka? - grito intentando levantarse para golpear a la muchacha.

- Al fin te encuentro - corrio hasta el pelinegro enojado y salto a él haciendo que ambos cayeran al suelo de la manera más brusca posible.

- Estás herida - limpio la sangre del labio de la chica - déjame curar... -

Su preocupación fue interrumpida por qué la castaña había chocado sus labios contra los de él, ella estaba temblando con sus manos firmes en las mejillas del Nara quien se sonrojo quedándose helado por la acción de la chica, ella le estaba regalando su primer beso a él, el pelinegro la tomó del cuello con un poco de torpeza intentando disimular sus nervios, por primera vez Shikamaru no tenía un plan y su mente estaba en blanco, ___ siempre demostró ser espontánea, hacía lo primero que se le venia a la mente, era impulsiva pero en ese momento ella temió mucho por Shikamaru.

- Tenía miedo - hablo aún sobre los labios del chico.

- ___... - junto sus frentes.

- No es el momento para su romanticismo - los asustó Asuma llegando a ellos - ambos deben regresar a la aldea.

Mientras Asuma cargaba a ___ en brazos Shikamaru se subía a su espalda para que su sensei no lo obligue a caminar pero antes de llegar a un lugar seguro una ráfaga de viento les pego de lleno haciéndolos caer bruscamente.

- Muestrate - ordenó el mayor.

- Asuma Sensei - la voz temblorosa de ___ los hizo reaccionar, a la espalda de la joven estaba una pelinegra que cubría la mitad su rostro con vendajes.

- Ella es una piedra en nuestros zapatos - dijo con su dulce voz la pelinegra apuñalando a ___ con un kunai.

- No - grito Shikamaru pero era tarde.

- No es nada  - dijo ella mientras sonreía cayendo de rodillas.

- ¡___! - grito corriendo a ella - esto es culpa de Sakura, ella debió dejarla dormida en la arena de batalla - intento cargarla pero estaba muy débil

- Shikamaru - Hablo Asuma

- No te duermas – le gritó a la niña

- Aún no es tarde - tomó en brazos a la niña.

- Hay que apurarnos, sensei -

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La lluvia cubrió a Konoha, en ese ataque se perdieron muchas vidas, como la del Hokage junto a la de muchos ninjas que juraron proteger con su vida la aldea, Konoha se tiñó de negro para despedir a cada uno de las personas que defendieron su hogar y salvaron vidas, nadie decía nada, todo era silencio para rendirle homenaje a esos guerreros que dieron la vida en batalla, "un ninja jamás muestra sus sentimientos" se repetían todos mientras pasaban a dejar flores dónde yacían las fotos de los ninjas y el Hokage.

Mientras todos despedían a sus amigos caídos, a las afueras de Konoha; dos hombres desconocidos se acercaban a paso lento para llegar a la aldea de la hoja, ambos estaban serios mirando el frente sin desviar la mirada del objetivo que tenían.

- Ya estoy cansado - dijo el castaño.

- No te quejes, esto es tu CULPA - Resaltó el peli-azul

- En realidad fue tu culpa, yo no te pedí eso - se defendió

- Solo cállate, estamos aquí por la advertencia de Orochimaru ¿Recuerdas? - el peli-azul miro a su compañero con aburrimiento.

- Lo se pero esto es aburrido -

- Tu aburres más que el camino - finalizó la conversación saltando a la rama de un árbol - Tu vida me aburre ahora apúrate antes de que me arrepienta y te mate aquí mismo - comenzó a alejarse dejando al castaño con una gota de sudor cayendo.