¿Hola, hola? ¿Está grabando? Bien: tres, dos, uno y...
¡Hola! Mi nombre es (T/N), y les hablo desde el bosque de mi ciudad; es medianoche, y creo que algo extraño está sucediendo aquí.
· · · ·
(T/N), una exploradora urbana, decide graba...
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—Buenos días, (T/N). Y... ¿quiénes son tus amigos?
—¡B-buenos días, Smoker! —saludó con fingida naturalidad—. ¿Qué amigos? —Miró alrededor—. Oh, estos amigos, ja, ja. —Carraspeó—. Él es Kid, y él es Ace. Al último lo acabo de conocer —musitó por si las moscas. El sheriff dio una calada su cigarro.
—¡Hola! —saludó Ace—. ¿Usted es el sheriff? Oh, dios santo, qué músculos. —Se puso a mirarlo, dando vueltas a su alrededor para verlo desde todos los ángulos posibles. De hecho, hasta se puso a fingir que encuadraba la imagen con sus dedos como si fuera una cámara. Smoker arqueó una ceja en señal de molestia.
—Déjelo, es... especial —susurró (T/N) con una sonrisa incómoda, y el hombre decidió ignorar al pecoso.
—He visto que tus padres están en la ciudad —comentó. Diablos, sí que volaban rápido las noticias. A veces (T/N) odiaba vivir en un pueblo tan pequeño; todos se conocían, era prácticamente imposible mantener tu privacidad intacta.
—Ah, sí, han venido de visita; se quedaran todo el fin de semana —mientras (T/N) respondía, Bimbo se acercó al sheriff y éste lo acarició sin despegar la mirada de la joven. Cuando acabó de hablar, asintió.
—Menudo momento han elegido para venir a visitar... —suspiró.
—¿Y eso? ¿Ocurre algo? —preguntó (T/N) preocupada. Smoker negó con la cabeza, intentando restarle hierro al asunto.
—Nada de lo que debas preocuparte —dijo, pero (T/N) sabía que le ocultaba algo. Smoker pasó al lado de Kid para continuar su camino, pero se detuvo—. Es raro... Nunca te he visto por aquí, chico, pero siento que te conozco de alguna parte...
En este momento, el corazón de (T/N) se paró, cogió sus maletas y llamó a un taxi para irse directamente al inframundo, sin Caronte ni hostias. Kid se quedó en silencio, al igual que ella, y Ace miraba la escena con una sonrisa sin enterarse del drama.
—Disculpa. Serán imaginaciones mías. —Hizo el amago de seguir caminando, pero se giró—. ¿Estudias en el Grand High? —Le preguntó, que era donde estudiaba (T/N). La joven asintió con la cabeza ligeramente para hacerle saber a Kid que esa era la respuesta correcta. Al fin y al cabo, ya había mucha gente pensando que era un estudiante de intercambio.
—Sí, sheriff —respondió educado. Smoker asintió tras darle otra calada a su cigarro.
—¿Os importa si voy a haceros una visita cuando empiecen las clases? —dijo con tono amenazador. O al menos era lo que (T/N) interpretó—. Un sobrino mío quiere cursar sus estudios aquí, me gustaría saber un poco cómo es y darle consejo.
Oh, solo era eso... O no, (T/N), no bajes la guardia, quizá está mintiendo y sospecha de Kid. ¡Ah, diantres!
—C-claro. Kid y yo estudiamos el mismo grado, así que ahí nos veras. —Se colocó un mechón de cabello detrás de la oreja. Smoker asintió a modo de agradecimiento y se marchó, por fin.
