Una asesina no puede amar a alguien [ Karma Akabane y Tú ]

~51~

POV (...)

Las dos próximas semanas nos las pasamos haciendo los preparativos junto a Koro-Sensei. Al final resulta que Karasuma no tenía ni idea de qué estaban planeando, pero tampoco era buena idea que se entere de lo que queremos hacer. Si ese fuera el caso, no podríamos hacer esto ni de broma.

Estoy muy emocionada. Quiero decir, ¡un viaje en cohete a la estación espacial! ¿Cómo no morirse de ganas por algo así?

- Bien, ya tenemos todo preparado para la misión, ¿quién se ofrece voluntario? - preguntó Isogai a toda la clase.

Ah cierto, que todavía no hemos decidido quién va a ir.

Todos los chicos menos Karma y Nagisa levantaron la mano. Yo obviamente también lo hice.

- Ya me lo imaginaba... - murmuró el mismo de antes.

- ¡Es una misión en la que originalmente iban a ir maniquíes y es muy peligrosa para un humano! ¿Quién se ofrece voluntario? - preguntó esta vez Koro-Sensei al lado del delegado de clase.

Ah, todos menos Itona bajaron la mano. Miedicas...

- Yo sigo queriendo ir - expresó el albino -. A cualquier amante de la tecnología le gustaría vivir una experiencia así. Sin embargo voy a cederle mi puesto a otras personas. Karma, Nagisa, creo que vosotros sois los más indicados para ir - dijo mientras les miraba.

- ¿Eh? No gracias, no me gusta la idea de ir en una misión tan arriesgada en la que tengo que depender de los demás para estar a salvo - se negó Karma.

- ¡Pero eso es lo divertido! - exclamé vigorosa.

- Alguien está bastante emocionada - murmuró burlon -. Mandemos a Terasaka y a un maniquí, si les ocurre algo no habremos perdido nada importante.

- ¿¡Qué has dicho!? - se quejó el nombrado.

- Karma el luchador agresivo y Nagisa el asesino tranquilo - habló Megu -. Creo que no hay mejor equipo para esta misión.

- Sí... Yo también pienso lo mismo - añadí un poco desilusionada.

- Karma, al menos intentémoslo - dijo Nagisa -. Estamos hablando de un viaje espacial con un amigo en secundaria, ¿no suena eso genial? - preguntó inocente el peliazul.

- Supongo que no me queda otra - suspiró el pelirrojo -. Dije que te escucharía así que si eso es lo que quieres, lo haré.

- Dejad que vaya (...) también - propuso Kaede.

- ¿Eh? ¿Por qué? - cuestioné confusa -. A estas alturas ninguno de vosotros necesita mi ayuda, todos sois totalmente capaces de hacer un trabajo extraordinario y perfecto, ni siquiera pienso que debería estar aquí ahora mismo...

- ¿Pero qué dices? Eres una parte fundamental de esta clase - comentó Nakamura -. Muchos de nosotros no hubiéramos llegado tan lejos si no hubiese sido por tí. Además, tener a una asesina loca en clase lo hace todo más entretenido.

Incliné ligeramente la cabeza hacia un lado más confundida todavía. ¿Esta gente me aprecia tanto? Me eché a reír en voz baja.

- Es increíble que la chica a la que le rompí la nariz cuando llegué aquí sea la que me está diciendo esto - dije entre pequeñas carcajadas.

- No sólo han sido ellos los que han cambiado (...)-chan - habló esta vez el pulpo -. Tú también has cambiado mucho, aunque no te hayas dado cuenta del todo - terminó diciendo con tranquilidad -. Es por eso que yo también pienso que deberías ir con ellos. Además, te mueres de ganas de ir en esa misión, ¿no es así?