Un amor inesperado

Capítulo 11 : Zona de amigos

Me detengo ante la escena.

Es lunes por la mañana. Un día y horario de mierda. Lo sé. Voy de lo más dormida y estoy muy segura de que solo me funcionan dos neuronas.

Sin embargo, todos mis sentidos se ponen alerta cuando veo a James hablando con una chica. Una chica que no es mi hermana.

Por no agregarle que estaban apoyados en los casilleros y James está por encima de ella, quién se ríe de cada estupidez que sale por su boca.

Esto es lo que estaba y estoy tratando de prevenir.

Acorto la distancia rápidamente y lo toco el hombro a James. Voltea y parece sorprendido de verme. ¿Qué piensa? ¿Qué hay un campo invisible que lo envuelve?

—¿Allison? ¿Qué estás haciendo aquí?

—La mismísima, y por si no te has dado cuenta estudio aquí— sonrío sin enseñarle mis dientes.

—¿Dónde está mi hermana?— interrogo sin rodeos. Se rasca la nuca nervioso.

—¿Qué sucede aquí?

Bufo con frustración.

—¿Y a ti quién te mando a llamar?— le pregunto a Max cuando se acerca a nosotros con su mochila colgada del hombro.

Ni siquiera me mira. Fija su vista en su hermano y parece ignorar el hecho de hay una chica roja de la vergüenza junto a él.

—¿Qué te está haciendo la loca?— inquiere refiriéndose a mi.

—Nada— intervengo.—Solo preguntaba por mi hermana. Ya sabes, tú novia.

—Allison, solo estaba pidiéndole a Sara ayuda con la tarea de matemática.

Entrecierro mis ojos mirando a Sara. Ella asiente rápidamente con la cabeza.

—Vete— ordena Max y la chica se va casi corriendo.

—¿Mi hermana y tu siguen juntos? ¿No la dejaste por Sara?

—No, no la dejé por nadie. Seguimos juntos.

Bufo. Suficiente por ese intento. Volteo y me dirijo a mi clase, hoy me toca la única que comparto con Max.

Entro al salón casi lleno. Sonrió al ver que Elliot tiene un lugar vacío a su lado y me hace señas con la mano para que me acerque.

—Hola— saludo con una sonrisa y desordeno su cabello.

Segundos después suena el timbre y más alumnos comienzan a entrar. Entre ellos, Max y Alan.

Sonrojarme es inevitable cuando lo veo. El viernes nos besamos y desde esa día no lo he visto, ni hablado con él. Parece buscar algo con la mirada. Se topa con la mía y cuando estaba apunto de bajarla, me sonríe y agita una mano en mi dirección.

Max, se gira a verlo y frunce el ceño al ver que yo también le devuelvo el saludo. No parece importarle mucho porque se gira y se sienta.

El profesor de sociología hace su aparición y todos guardan silencio. Otra clase más.

No tardaré mucho en dormirme.

                            ***

Un golpe seco contra el pupitre de madera me sobresalta y alzo mi mirada. Tengo ganas de meterme en un pozo cuando noto al profesor de sociología mirándome con una ceja alzada. Sostiene un gran libro de pasta dura en la mano. Apuesto que me despertó con eso.

—Johnson.

—Uh...— murmuro y me quedo en silencio. ¿Qué voy a decirle? ¿Qué estaba meditando sobre el hombro de Elliot con los ojos cerrados?