Lo quiero con la sangre, con el hueso,
con el ojo que mira y el aliento,
con la frente que inclina el pensamiento.Con este corazón caliente y preso,
y con el sueño fatalmente obseso
de este amor que me copa el sentimiento,
desde la breve risa hasta el lamento,
desde la herida bruja hasta su beso.Mi vida es de tu vida tributaria,
ya te parezca tumulto, o solitaria,
como una sola flor desesperada.Depende de él como del leño duro
la orquídea, o cual la hiedra sobre el muro,
que solo en él respira levantada.Juana de Ibarbourou

ESTÁS LEYENDO
Caminos Cruzados
RomanceSam y Rocío son dos jóvenes que estudian en la misma universidad, pero nunca han cruzado palabra alguna, soló miradas, hasta que llega el día en el que cruzan sus caminos finalmente, ambos tienen sus problemas, y ambos buscaran la manera de ayudarse.