37. JUNTOS

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Cuando Taehyung y Hoseok llegaron al aeropuerto de Estados Unidos no esperaron ver a sus seis amigos con carteles gigantes dándoles la bienvenida y llamando la atención. Cuando estuvieron frente a frente no sabían qué hacer.

Taehyung les dijo que no lo abrazaran porque podría reaccionar mal, y allí estaba ellos sin saber cómo expresar aquel sentimiento de añoranza que tenían. Lilian tampoco podía ocultar sus ganas de abrazarlo, pero lo estaba intentando igual que el resto.

Hoseok sonrió feliz y con lágrimas en sus ojos abrió sus brazos para que fueran a abrazarlo. Tardaron unos segundos en reaccionar, pero luego todos estaban llorando de felicidad mientras abrazaban a la parte fundamental del grupo.

Taehyung solo graba mientras lágrimas salín sin control. Por fin podían volver a ser los mismos de antes, aquel grupo de siete que siempre fue inseparable y que se movía siempre a favor de todos, con una chica sumada a la ecuación que le daba un toque genial.

-Por fin estamos juntos de nuevo. Chicos a prueba de balas- habla Namjoon cuando se separan. Empezaron a reír porque todos tenían sus ojos rojos y algunos estaban hipando.

-Vamos a demostrarle al mundo de lo que estamos hechos, ¿cierto, Hoseok?- el nombrado mira a Taehyung y asiente efusivamente. Se sentía muy completo y lleno de amor por ellos.

(...)

Los chicos los llevaron a su nuevo departamento que era gigante y con habitaciones para cada uno. A Hoseok como le prometieron en una video-llamada le dejaron el mejor cuarto, tenía ventanales que daban a la gran ciudad y con un balcón para que pudiera aspirar el aire puro de ese lugar.

Después de todo estaba en una residencia de la academia que los había escogido y esta estaba en un lugar lleno de vegetación en la montaña. Tenían una buena vista nocturna y no había el ruido de la ciudad ya que debían mantenerse tranquilos para ser grandes artistas que ganen competencias y trofeos para la academia.

Taehyung y Hoseok recibieron ayuda de todos para poder arreglar sus habitaciones, excepto por Lilian ya que era prohibido que una mujer esté en el dormitorio masculino y viceversa.

-Te va a encantar estar aquí, hay salas inmensas de práctica, estudios con todo el equipo, gimnasio y cafetería saludable. Los chicos de aquí son geniales, hay muchos de distintos países- Jimin dice feliz de la vida recordando todo lo que hay para ellos.

-Eso es genial- Hoseok dice en bajo.

-Pero debemos practicar más para ser aceptados en competencias. Si eres escogido para competiciones, tienes más oportunidades de quedarte. Algunos chicos han tenido que regresar a sus países por no brindarle ningún premio a la academia en mucho tiempo.

Hoseok ya lo sabía, todo sería bonito si le das victorias a la academia. Tendría que recuperarse de todo el tiempo que no bailó, por suerte Taehyung le hizo bailar un poco antes de tener el viaje y eso lo había motivado más. Sentir su cuerpo cansado por hacer lo que amaba y no por drogas.

Hoseok agita su cabeza borrando los amargos recuerdos que venían a su cabeza. Debía pensar en otras cosas que no sean sus días de tormento. –No te preocupes. Lo harás genial. Recuerda el baile que te trajo hasta aquí.

-El que ocasionó mi encierro- no quiso decirlo, fue automático y estaba arrepentido. Vio con temor a Jimin y por suerte no tenía ninguna mirada de tristeza.

-No, Hobi. Es hora que aceptes que él ocasionó todo esto. Tú solo hacías lo que amabas y que él no lo viera de esa manera y te respetara no significa que fue por ti y el baile increíble. Él no estaba bien mentalmente y tú no tienes la culpa de ello. Fue un error, pero lo que importa es que ahora estás aquí, de pie y con ganas de triunfar ante el mundo.

Jimin desde que empezó a hablar tenía las lágrimas rodando por sus mejillas. Quería ayudar a Hoseok a como dé lugar y lo primero era hacerle ver que no tuvo la culpa de nada, que no fue su culpa haberse topado con alguien enfermo que quería acabar poco a poco con él.

-No llores- Hoseok dice llorando también.

-Lloro porque estoy feliz de tenerte de nuevo a mi lado. Gracias por ser fuerte y no rendirte, Hobi.

Hoseok fue quien se acercó a Jimin y lo abrazó con fuerza. Las cosas irían bien siempre y cuando tuviera a sus amigos a su lado. Una persona herida es como un lobo herido, necesita de alguien para curar las heridas que no alcanza a lamerse. Es bueno aceptar ayuda cuando uno ya no puede más, no somos seres inmortales llenos de poder que por más heridas que tengan se curan enseguida y continúan como si nada hubiese pasado, no, somos simples humanos que necesitamos ayuda de vez en cuando.

-Vamos a comer, chicos. Jin preparó algo delicioso- Yoongi entra a la habitación y se queda quieto en la puerta al ver a sus amigos abrazados. –Podremos abrazarnos luego.

-No dañes el momento, Yoongi- habla Jimin cuando se separan y Hoseok tiene una sonrisa tímida.

-Yo quiero un abrazo- Jimin abre sus brazos y Yoongi hace una mueca de asco. –No de ti, animal. Hoseok siempre me daba energía si me abrazaba. ¿Qué tal abrazarme ahora?

-Claro- Hoseok sonreía por la broma que Yoongi hizo y se acercó a abrazarlo.

-Así es, Hobi. Todos te necesitábamos de regreso. Eres nuestro pegamento, siempre nos mantenías unidos.

-Gracias por todo, Yoon. También te extrañé- ambos sonríen y suspiran al tenerse así de nuevo. Una gran paz estaba adueñándose del cuerpo de Hoseok, una paz que solo la tenía con ellos.

-Ahora vamos a comer, Jin está esperando- interrumpe Jimin con una sonrisa tierna.

Ambos se separan del abrazo y los tres van a la cocina pequeña donde estaban los demás. Hoseok se siente de nuevo en casa, se arrepentía de muchas cosas. Pero jamás de haber convencido a sus padres de mandarlo con el resto a Seúl. Ni tampoco de haberles llevado pastelitos su primer día de clases, gracias a ello empezaron una gran amistad.

Hoseok se sienta a lado de Taehyung y le da una gran sonrisa. –Gracias por quedarte conmigo cuando ni siquiera yo mismo encontraba el sentido a mi vida- dice en bajo mientras los demás hablaban de llevarlos a dar un tour por la ciudad.

-Hoseok, sabes que lo hice porque eres alguien importante para mí. Siempre lo fuiste y tenemos mucho tiempo por delante para que puedas confirmar lo importante que eres para nosotros. Poco a poco seguiremos avanzando.

-Aún recuerdo lo que dijiste el día de la presentación, Tae. Te prometo que pronto estaré listo para empezar desde cero- Taehyung se queda congelado ante esas palabras y segundos después sonríe con lágrimas en los ojos.

-Poco a poco, Hobi. Esperaré el tiempo que sea necesario. Pero primero hay que seguir trabajando en ti, es lo que más importa ahora. Que tú estés bien, sol.

Se sonríen y Hoseok lleva su mano temblorosa encima de la mano de Taehyung. –Gracias por ser parte de mi vida.

-Gracias por aceptarme de nuevo en la tuya, sol. Sigamos luchando juntos.

Las cosas estaban yendo bien. Una persona rota necesita su tiempo para sanar y aceptar todo lo bueno que está por venir. Pero estoy segura que todo va mejor cuando tenemos a las personas correctas a nuestro lado. El tiempo y las personas indicadas lo curan todo, solo es cuestión de esperar y querer mejorar. Siempre tendremos oportunidades para salir adelante y recuperar lo perdido, después de todo, el que persevera alcanza.

FIN 

Así es, este es el fin de esta historia.

Espero les haya gustado y hayan entendido el mensaje que traté de compartir con ustedes. Gracias por quedarse hasta el final y haber comentado y apoyado algo que llevo escribiendo un tiempo.

BYE~ BYE~

Una mala decisión [VHOPE/VOPE]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora