The family Delacroix ©

Capítulo 33

Capítulo 33:
La verdad siempre sale a la luz.

Darling Delacroix.

Algo.

Necesito algo.

Lo que sea.

Necesito demostrar que mi hermana no mató a ese ser despreciable. El odio, el rencor y la repulsión que Dafne sentía por él no eran motivos para que ella hiciera esa atrocidad.

Yaviv no creía que ella lo podía hacer... así que yo tampoco.

Mi teléfono suena en mi chaqueta así que lo saco y sin ver quién es, contesto.

—Delacroix —digo.

—Darling —la voz de mi hermana suena al otro lado del teléfono y sólo bastó que dijera mi nombre para que lágrimas de frustración salieran solas.

—¿En dónde estás?

—En las oficinas. Sé que me fui pronto del lugar, pero necesitaba hacer algo para sacar a Dafne de dónde está. Tú...

—Ella no lo hizo. Lo sé, Danett, lo siento en corazón.

Escucho cómo ella suspira y puedo sentir lo cansada y agobiada que está.

—Yo también. Esto es tan frustrante. Me sacaron del caso.

Oh. Dios.

—A ti. A mi no —respondo muy segura de mi misma—. Seré su abogada, haré lo que esté a mi alcance para sacarla de ahí. ¿Tú cómo estás?

—Pensando —su voz es apagada y sumisa por unos momentos, la conocía lo suficiente como para saber que estaba ideando un plan y sus planes son siempre los mejores—. Escuchame bien, me sacaron del caso Alabitt más no del Delacroix. Así que tú te encargarás de averiguar quién mató a Yusuf Alabitt para sacar a Daf de prisión. Yo empezaré a buscar a Douglas y si tenemos a Douglas...

—Tenemos a Zidan.

—Exactamente —concuerda ella—. Justo ahora lo importante es librar a Dafne, tienes que encontrar pruebas contundentes, yo te daré el número telefónico de amigos criminalistas. Estoy segura que la huellas de Dafne no están en esa flecha.

—Perfecto. Estoy en la escena del crimen —le informo mientras camino por el lugar y veo como aún hay policías y criminalistas—. Ya se llevaron el cuerpo, pero necesito encontrar algo... lo que sea.

—Sé que lo harás.

Mi mirada se centra en los edificios que están al rededor. Es una zona poco poblada llena de bodegas que fingen estar abandonados en su fachada pero que aún están en funcionamiento.

Drogas, muchas cosas ilegales y fuegos artificiales reinan en ésta zona.

Sigo mirando la bodega de los Alabitt y el enorme charco de sangre que dejó el difunto Yusuf.

Giro mi cabeza hacia el lugar en dónde fue lanzada la flecha y recuerdo en qué posición estaba Dafne.

Técnicamente Yusuf murió frente a su edificio mirando hacia el lado derecho. Él miraba hacia el lugar en dónde lo apuntaron, pero Dafne no estaba frente a él, si no de su lado derecho, frente al edifico que le pertenecía al difunto.

Si Dafne lo mató, tendrían que haber estado frente a él, no a su lado.

Por eso Yaviv la vio, porque estaba frente a la puerta del edificio.

Me giro para ver el edificio que queda en frente al de los Alabitt y lo tengo.

—Bingo —le digo a mi hermana que aún estaba al teléfono para luego cortar.