Capítulo 58

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    Katherine

    Subo primero al jet de papá, no quiero ni imaginarme lo que pasó abajo cuando comencé a subir. Fue evidente que Eros se puso celoso por como me miraba Aslan y le agradecería que le pusiera un freno, pude sentir su mirada en mi trasero cuando subía y por más que esté bueno el turco, hay veces que me hace sentir un poco incómoda.

    Cuando veo que primero ingresa Aslan y como no quiero que se siente a mi lado me levanté rápido y me encerré en el baño hasta que la asistente de vuelo me avisa que debo ubicarme para iniciar el despegue. Al salir veo que Aslan está sentado donde dejé mi bolso y Eros al final de todo casi oculto detrás los asientos.

    Pensaba pasar directamente hacia atrás, pero Aslan quiere cambiar mis planes.

    -Ven Kathy siéntate a mi lado, así podríamos ir repasando algunos pendientes durante el viaje.- dice y yo más que nadie sé que eso es una excusa porque no quedó ningún pendiente el día de ayer.

    -En un segundo estaré contigo, primero tengo que discutir un par de cosas con el Sr. Cook.- le digo seria y paso directamente a sentarme al lado de Eros.

    -No recuerdo que tengamos asuntos pendientes por discutir Srta. Smith.- me susurra serio luego de tomar asiento.

    -No concuerdo con usted Sr. Cook, tiene una gran deuda pendiente conmigo.- digo mirándolo por encima de mis gafas de sol.

    -Ah... lo había olvidado... ¿Qué era lo que quería saber?- dice haciéndose el que intenta recordar, pero la sonrisa maliciosa que se dibuja en sus labios me dice que lo recuerda muy bien.

    -Intente recordar, ¿O está un poco viejito y ha comenzado a perder la memoria?- le digo bajito devolviéndole la misma mirada que me dio él.

    Girándose rápidamente hasta casi estar encima de mí, con su rostro a escasos centímetros del mío y sus manos a los lados de mi cadera me mira fijamente haciendo que mi cuerpo se caliente en tiempo récord, mi corazón se acelere y las jodidas mariposas inicien una guerra en mi abdomen.

    Ese perfume que usa debería estar prohibido, no sé si tendrá algún tipo de esencia exótica que hace mojar bragas de solo sentirlo o es la combinación con su aroma personal lo que lo hace una mezcla explosiva para tenerlo tan cerca a estas horas de la mañana.

    -Primero debería ayudarla a ponerse el cinturón de seguridad.- dice cruzando mi cinturón correctamente. -...Luego si quiere puedo ejercitar mi memoria marcándole cada lunar que decora su delicada piel, como el que tiene por aquí...- ahora susurra mientras roza la base de mi pecho derecho donde tengo un lunar. -O la marca de nacimiento que tiene justo por aquí...- continúa metiendo un dedo por la cintura de mi pantalón hasta rozar el hueso de mi cadera haciéndome soltar un suave gemido.

    Intenté contenerlo, pero sé que lo escuchó perfectamente porque sus pupilas se dilataron y cuando sus ojos se desviaron hacia mis labios, su mano dentro de mis pantalones cambió de dirección dirigiéndose hacia mi sexo que ya está completamente húmedo y supe en ese instante que si llegaba a rozarme no podría contenerme así que tomando su rostro con ambas manos comienzo a besarlo desesperadamente.

    Por supuesto que correspondió a mi beso con la misma intensidad y cuando su mano llegó a su destino, soltó en mi boca un suave gruñido y comenzó a mover su lengua al ritmo que su mano lo hacía con mi clítoris volviéndome completamente loca cuando permanece jugando con un dedo en mi clítoris mientras que con otros dos se abre paso en mi interior haciendo que mis caderas cobren vida y se muevan en círculos para aumentar la fricción mientras continúo ahogando gemidos en el interior de su boca.

Mi GuardaespaldasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora