Capítulo 62

38.5K 2.1K 216
                                    

    Bajando del jet, nos encontramos con dos sub negras con vidrios tintados junto a dos agentes parados a cada lado de estas, reconozco a Jones y Clark. Los otros dos no los había visto nunca y aparentemente ellos definitivamente no esperaban ver al temible agente Cook caminando hacia ellos con una mujer tomada de la mano y para ser sincera tampoco me lo esperaba yo, cuando terminé mi trabajo en la habitación del jet pasé por el cuarto de baño para recomponerme y me volví a mi asiento.

    Él se nos unió a Taylor y a mí unos minutos más tarde y no volvimos a cruzar palabra ninguno de los tres. Por eso me sorprendió que al terminar de bajar las escaleras tome mi mano con la suya entrelazando nuestros dedos me hace asustar y casi preguntarle quién era y qué había hecho con Freezer?

    Pero me contuve ya que sabía que su respuesta seguramente sería un gruñido.

    -Buenas tardes jefe, ya tenemos todo preparado y organizado para llevar al testigo protegido a la casa de seguridad.- dice Jones sin siquiera mirarme, solo lo mirando a Eros a los ojos como si tuviera miedo de pasarse si desviaba la mirada hacia mí.

    -Hola Sr. Jones. ¿Cómo está tanto tiempo?- pregunté sintiendo como el agarre en mi mano se intensifica. -Sr. Clark, también me alegro de verlo.- digo sin hacer caso a la silenciosa advertencia del Sr. Celos y los agentes se ven realmente nerviosos sin saber si responder o no así que decido ponerle paños fríos al asunto valga la redundancia.

    -Tranquilos que no muerde, estoy en proceso de domesticar un poquito a la bestia.- les digo con una sonrisa pícara y el silencio se instala por un segundo hasta que siento el mal intento de contener una risa detrás mío para dar paso a una sonora carcajada por parte de Taylor haciendo que los agentes en frente mío se relajen un poco y respondan solo con un "Buenas tardes Srta. Smith" Para luego desviar la mirada hacia Eros y al ver su rostro vuelven a su postura de antes mientras siento que suelta mi mano para ponerla en mi espalda baja mientras gruñe como un animal antes de casi arrastrarme dentro de la camioneta y cerrar con un poco de fuerza tomando luego el asiento a mi lado mientras en el del copiloto se sienta Taylor y en el del conductor Clark.

    Saliendo del aeropuerto giré mi rostro para mirar a Eros, pero este me ignora tomando su móvil para hacer una llamada y cuando intento tomar su mano la aleja con brusquedad dejando en claro que no está nada contento con lo que dije.

    "Bueno, pues lo.. la.. men.. to... freezer, pero no voy a pasar de mal educada solo porque el señor no quiere que salude a los hombres..." la voz en mi cabeza me hace dar cuenta de que si le hago caso va a terminar por encerrarme en una jaula para que no vuelva a tener contacto con el mundo exterior y eso es algo que no le voy a permitir. De modo que mirándolo molesta yo también me alejé hacia el otro extremo de los asientos traseros y saqué mi laptop para ponerme al día con los correos de la empresa sin volver a prestarle atención.


    Alrededor de unos 30 o 40 minutos más tarde, estacionamos frente a una casa cercada por un muro de ladrillos y rejas que por partes dejan ver una pintoresca casa gris de dos plantas con bastante terreno a su alrededor por lo que supongo que debe estar sumamente equipada con cámaras de vigilancia para facilitar el control desde todos los ángulos.

    Cuando Eros baja, me abre la puerta y me tiende la mano para ayudarme a bajar pero como una niña caprichosa que a veces soy, ignoro su mano y me bajo por mis propios medios.

    -¿Dónde estamos Taylor?- pregunto mientras me paro a su lado antes de entrar a la casa.

    -En el distrito de The Bronx Srta. Smith.- dice y aunque me molesta un poco que haya vuelto a ser el cortante Taylor que conocí al principio, decido ya no discutir más con ninguno de ellos. Necesito ponerme a trabajar en cosas más importantes que lidiar con los cambios de humor de los agentes de la C.I.A.

Mi GuardaespaldasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora