Capitulo 2

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Eros

    -Señor Cook, tiene una llamada del presidente de Interpol por la línea uno.- llega mi secretaria corriendo sin aliento desde el pasillo como si el mismo presidente de la nación estuviera llamando. Aunque debo reconocer que es un poco raro que me llame Travis un viernes a primera hora.

    -Tranquilízate Alina y comunícalo inmediatamente.- le digo, esta chica es muy eficiente pero un poco exagerada a veces.

    -¿Tanto me extrañas que no han pasado ni dos semanas desde la última vez que hablamos y ya me estás buscando otra vez? Te recuerdo que no soy nada fácil Travis, tendrás que trabajar duro para lograr conquistarme.- Bromeo al levantar el tubo sin dejarlo hablar primero.

    Nos conocimos hace ya mucho tiempo cuando compartimos los primeros años de facultad, pero su familia se mudó a París y luego él se convirtió en el presidente de Interpol y yo en agente de la CIA, nunca dejamos de hablar y en ocasiones tenemos oportunidad para encontrarnos o nuestros trabajos en ocasiones nos unen con criminales en común.

    -No estoy para bromas hoy Eros, necesito que traigas tu culo a este lado del océano cuanto antes.- dice en un tono de voz que no es habitual en él, está ansioso y podría jurar que no durmió en días.

    -¿A quién tienes entre manos Travis?- pregunté sin más rodeos, son varios los criminales internacionales a los que estamos buscando en conjunto, y su llamada me dice que estamos cerca de alguno de ellos.

    -El Ruso Nikholay.- dice y me hierve la sangre de solo escuchar su nombre, es un mafioso traficante de todo tipo de cosas y personas, cualquier cosa que sea ilegal el maldito ruso se encarga de eso. Y es tan escurridizo que se nos ha hecho imposible seguirle el rastro por casi cuatro años aparentemente hasta ahora.

    -Reúno a mi equipo y salgo inmediatamente para allá. Envíame un correo con lo que tengas para ponerme al tanto antes de aterrizar y movernos con más rapidez.- le digo mientras ya estoy recogiendo mi arma de mi escritorio, el maletín con la portátil y el expediente del ruso.

    -Te lo acabo de enviar, pero no vengas a París, me dirijo hacia el aeropuerto, nos encontramos en Londres.- dice y lo escucho agitado así que supongo que también se está moviendo.

    -Perfecto, te llamo cuando aterrizo.- le digo y finalizo la llamada mientras salgo de la oficina y me encuentro con Alina.

    -Alina, llama a Taylor, Miller, Jones y Clark. Diles que tenemos trabajo y avisa al piloto que prepare el jet, en una hora salimos para Londres.- me sigue por el pasillo tomando notas mientras me dirijo hacia el ascensor.

    -Perfecto señor, la llamaré a Alice para que le prepare la maleta.- Bien pensado, que mi ama de llaves me prepare la maleta me ahorra bastante tiempo mientras me dirijo hacia mi apartamento.

    -Gracias Alina, nos vemos a mi regreso.- le digo mientras las puertas comienzan a cerrarse.

    -Buena suerte Señor.- dice y yo solo asiento, no creo para nada en la suerte ni en el destino. Solo creo que cada uno forja su propio destino y controla su suerte. Las cosas no pasan al azar, cada una de nuestras acciones traen consecuencias y nuestra reacción a ellas es lo que nos define como personas.

    "Si tomas buenas decisiones vendrán cosas buenas, si tomas malas decisiones tienes que levantar el pecho y recibir las balas. Creo que es así de simple la vida siempre y cuando el corazón se mantenga alejado, cuando se involucran los sentimientos todo se vuelve una mierda."


    Dos horas más tarde ya tengo a todo el equipo trabajando en la información que envió Travis. Miller nuestro investigador se encarga de recabar los datos necesarios acerca de nuestro contacto con el ruso. Según afirma Travis, las amenazas que estuvo recibiendo el Sr. Smith concuerdan con el modus operandi de Nikholay y tiene pruebas de ello, pero necesito informarme bien de qué es lo que pretende con este tipo para estar seguro de que se trate de él y no de un simple imitador que solo pretende un poco de dinero para vicios. A estas alturas ya no me sorprende que la gente haga locuras solo por unos dólares... o euros en este caso.

Mi GuardaespaldasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora