El silencio absoluto es una de las peores señales en un campo de batalla
Apenas terminamos de desayunar nos despedimos de Liath y Dub, no había garantías que no nos descubrieran a partir de ahora, les insistimos a los gemelos que tuvieran mucho cuidado y estuvieran muy atentos, entonces nos dirigimos al Gremio, nos cruzamos con algunas patrullas de soldados que nos saludaban alegremente, ya se habían habituado a nuestra presencia y resulto que Ariadna era muy conocida además era idolatrada por los soldados de la Guardia de la ciudad, que la veían como una heroína aunque Ariadna pareció sentirse avergonzada cuando supo sobre eso.
Apenas salimos del distrito militar y volvimos a ser seguidos, caminamos rápidamente haciendo lo que ya era una rutina establecida, primero al orfanato para saludar a la señora Edena y luego al Gremio, allí volvimos a saludar a todos los presentes antes de finalmente ser recibidos por el supervisor Sancor.
-"Bienvenidos jóvenes"-, saludo alegremente el supervisor Sancor.
-"Buenos días, espero que los planes vayan bien"-, saludó la señorita Cilia.
-"Buenos días"-, dijo de manera algo sombría Ariadna lo que llamo la atención de ambos.
-"Los planes van bien pero ha surgido un problema"-, dije haciendo una cara de preocupación.
-"Hum cuéntenos de que se trata joven Greenhill"-, dijo el supervisor Sancor al tiempo que alzaba su mano para evitar que hablara la señorita Cilia lo que la tomó por sorpresa.
-"Ayer me siguieron incluso dentro del distrito militar, pero por fortuna pude sacármelos de encima antes de llegar a la casa segura"-, dije de manera seria.
Lo que tomo por sorpresa ambos, inmediatamente el supervisor Sancor comenzó a pensar profundamente.
-"Pensar que llegarían hasta ese punto, la situación debe ser mucho más grave de lo que anticipamos"-, dijo con seriedad la señorita Cilia.
-"Así es, no podremos seguir evadiéndolos por mucho más tiempo, temo que tarde o temprano aten los cabos y descubran a Ariadna"-, dije firmemente.
-"Por eso hoy volveré al orfanato a cuidar de todos"-, dijo desanimada y agachando la cabeza Ariadna.
-"Por ese motivo creo que ya debemos pasar a la ofensiva, no sabemos de lo que serán capaces si esperamos más tiempo"-, dije con firmeza.
-"Ciertamente, las vidas de madeimoselle Edena y los niños se verán amenazadas, creo que hablare con la guardia de la ciudad para destacar una grupo de guardias en las cercanías del orfanato"-, dijo con seriedad la señorita Cilia.
-"No se preocupen! Nada de eso será necesario!"-, dijo con una sonrisa confiada el supervisor Sancor lo que tomo por sorpresa a todos incluyéndome.
-"Que quieres decir con eso anciano"-, dijo molesta Ariadna.
-"Tiene un plan en mente Monsieur?"-, pregunto confundida la señorita Cilia.
-"Llego la hora de cobrar algunos favores pendientes"-, dijo con una sonrisa confiada el supervisor Sancor.
-"Monsieur?"-, preguntó la señorita Cilia con una cara de duda.
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Mi segunda vida en un mundo de fantasía
FantasyDespués de vivir una larga vida en la tierra finalmente llego el momento de partir, postrado en la cama de un hospital, rodeado de una numerosa familia, entre sollozos y miradas tristes de despedida, llevando numerosos recuerdos, unos buenos, otros...