Donde tus perversiones darán vida, desde el ship más común hasta el ship que quizá nunca se imaginaron.
AVISO: FALTAS ORTOGRAFÍA Y NARRACIÓN A MEDIAS. (AÚN FALTA CHECAR LOS ESCRITOS PARA ARREGLAR ESE TEMITA. ALGÚN DÍA ME TOMARÉ EL TIEMPO JAJAJA)
Hij...
Sesshomaru se elevó en los aires, Y justo antes de caer, Rin lo alzó con sus poderes, aún estando de rodillas.
Jaken tomó las riendas del asunto y usó sus poderes para poder atraer a Sesshomaru hacia él, quien aún estaba inconsciente. Lo dejó a un lado y corrió hacia Rin.
Estaba cabizbaja, su respiración era débil y se complicaba a ratos, estaba agitada.
–Jaken—se arrimó en él.
– ¿Qué pasó? ¿Por qué estás así? no pareces del todo recuperada—le decía mientras la llevaba en sus brazos al interior de la casa y Sesshomaru flotaba gracias a sus poderes, tras ellos.
–me escapé—decía entre hilos de voz.
– ¡¿Cómo dices?!—
–cuando desperté estaba muy mal, Kikyo no estaba, salí de esa habitación y sin querer escuché una charla que el señor Inu No Taisho tenía con Tsukiomi. Hablaban de Sesshomaru, así me enteré de que él estaba mal... Y...—
–escapaste. Pero, Rin... estás muy mal—
–el que me importa es Sesshomaru. Y al parecer se enteraron de que escape. Es tan obvio con estos truenos—miró el cielo y después de decir esto cayó desmayada.
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Acomodó a Sesshomaru en su habitación, y a Rin en la de ella, viéndola débil, la envolvió en su poder de autorregeneración, que a comparación del trabajo de Kikyo, era algo muy débil, y mientras, aparte, se encargaba de hacer remedios caseros tradicionales para la herida.
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– ¡¡Chicos!!—gritaron a los lejos al interior de un auto. Cuatro jóvenes bajaron y caminaron hacia el resto de los chicos. Eran Renkotsu, Suikotsu, Ginta y Hakkaku, y es que los 4 estaban en una tarde de compras, y es que en poco ellos... bueno, ya lo dirían.
Y claro que después de saludarse se divirtieron con otro tema.
– ¿Qué les pasó? ¿Por qué traen vendas en la cabeza?—preguntó Sango a Renkotsu y Suikotsu.
Bankotsu comenzó a reír mientras Jakotsu cruzaba sus brazos y ponía un semblante serio después de recordar lo sucedido. Renkotsu y Suikotsu narraron lo ocurrido haciendo reír al resto.
–Por lo visto pasarán la primavera junto a nuestro internado—agregó Hakkaku—vimos los afiches sobre eso—
–cierto, no me había dado cuenta de eso—comentó Ayame.
Y tras un silencio extraño...
–nosotros partiremos dentro de una hora—dijo Renkotsu.
Todos parecieron algo sorprendidos con la noticia, menos sus primos.
