Londres, 1970.
Catherine Jacobs no era una chica de 19 años que se pudiera tipificar cómo "normal". Nunca lo había sido y nunca lo será... Era bonita, sí, por supuesto que sí. La genética la había favorecido significativamente,pues a pesar de ser de baja estatura, tenía un cuerpo muy bien proporcionado, tenía el cabello castaño claro y largo, ojos claros y de piel blanca, aunque tenía algunas pecas en la cara que a veces, la acomplejaban y debido a ello, le apodaban "cookie".
Nunca usaba vestidos, de hecho, los odiaba a tal grado, que si le llegaban a regalar uno, solo se limitaba a sonreír falsamente y después de agradecer el presente, corría a su habitación y refundía la prenda en el más oscuro de los rincones de su armario de tal manera, que ya no se acordaba en dónde los escondía y si acaso los encontraba, ya habían sido devorados por las polillas.
Si todo esto fallaba, los vendía en la universidad a sus compañeras o a las que iban en grados superiores y así, se hacía de un poco de dinero para comprar libros baratos y cigarros sueltos, o bien, para algún imprevisto que surgiera. Le gustaba mucho vestir con jeans y playeras muy holgadas por comodidad, sin dejar un par de tenis negros.
Estudiaba en la carrera de Literatura Inglesa en la Imperial College de Londres...¿Su vida social? Tenía tres amigos muy agradables... Roger Taylor, Freddie Mercury y Brian May, a quien admiraba mucho por su brutal talento cómo guitarrista. Catherine sostenía una relación de años con un joven de Leicester llamado John Deacon, quien era un joven muy guapo de ojos grises, labios rosados, cabello castaño y piel de marfil.
Cuando no estaban con los demás, se soltaban a hacer el amor, casi siempre en una vereda cercana a un muy viejo árbol. Era aún más bello tener sexo cuando la puesta de sol estaba a la vista.
Y aquí vemos que Catherine fue la neni inglesa de los 70's.
Annie 💕
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And I Love Him Parte I// A George Harrison's Love Story (+18). Finalizada
FanfictieCatherine Jacobs pelea contra sus instintos carnales y todo lo que siente hacía su maestro de música, George Harrison, a pesar de su relación formal con su novio, John Richard Deacon... Sabrá que su vida no podrá ya ser jamás la misma por los encuen...