ᴀɴɢᴇʟ // ᴊᴊ ᴍᴀʏʙᴀɴᴋ

TWO

La casa de Amelie no era una casa muy grande, pero la chica se había esforzado en hacerla ver como un hogar; tenía el jardín bastante bien cuidado y unas grandes piedras que llevaban hasta el porche

La casa de la castaña era blanca con algunas partes azules, como la puerta de la casa o algunos escalones y parte de la fachada

JJ siempre bromeaba que parecía una casa a la que ir a fumar y Amelie negaba diciendo que era bonita, que ella y Rose se habían esforzado en que no pareciese una de esas casas; porque era así

Antes de Amelie se mudase al corte, la casa era bastante simple y sin nada azul, hasta que Rose la vio tan triste que compró botes de pintura y aquello fue un nuevo inicio para ambas

JJ llevó su puño hasta la puerta azul, dejando un par de golpes en ella, esperando a que abrieran la puerta, cosa que no tardó en suceder

—Hola— saludó Amelie abriendo la puerta y volviendo a la cocina rápidamente

JJ entró cerrando la puerta a sus espaldas para ir hasta la cocina dejando lo que había pescado sobre la mesa para después alzar su mirada encontrándose a la castaña de espaldas y con su cabello bajando por su espalda; el rubio entrecerró sus ojos al ver los pantalones que la chica llevaba

—¿Qué tal la pesca?— preguntó ella sin mirarle— Veo que bien— contestó girándose hacia la bolsa con un par de peces y encontrándose con los ojos de JJ en sus piernas—¿Te gustan?— preguntó con una sonrisa pasando sus manos por la tela de los pantalones de lycra con un estampado de cebra

JJ la miró en silencio, pasando sus ojos sin disimulo por el cuerpo de la castaña; mirando la cara sonriente de Amelie para después ir bajando hasta su cuello y tragando saliva cuando llegó a su pecho donde varias pecas, las cuales JJ juraba que le hacían perder la cordura, lo adornaban

El rubio notó como la castaña no llevaba sujetador debajo de aquel top negro que se pegaba a su cuerpo de una manera perfecta; bajó la mirada hasta el vientre descubierto de la chica sin pasar de largo sus curvas y después miró aquel pantalón que se pegaba a sus piernas y trasero

 Para JJ, el cuerpo de Amelie era el cuerpo perfecto, amaba cada parte de él, deseaba pasar sus dedos por encima y decirle a la castaña cuánto le gustaba cada parte de ella

—JJ— llamó Amelie, JJ pestañeó un par de veces volviendo a la realidad—¿Qué te parece?—volvió a preguntar volviendo a pasar las manos por sus muslos para después subirlas mientras se acariciaba hasta su cintura, JJ suspiró tembloroso

—Perfectos— contestó JJ, Amelie sonrió con ilusión acariciando la tela suave

—Me los ha dado Jess— explicó Amelie quitando la comida del fuego para después acercarse a JJ que la miraba atento— Decía que ya no le cabían pero no me lo creo, creo que no los usaba y me los ha dado

—Bueno, es algo mayor para llevar esos pantalones— contestó JJ con una sonrisa, Amelie negó

—Es joven— aseguró Amelie, JJ resopló— Solo tiene 28— contó ella acariciando sus pantalones—Mira qué tacto

Amelie agarró la mano de JJ ilusionada y la llevó hasta su muslo, pasando la mano del chico por la tela, JJ la miró nervioso mientras Amelie sonreía mirando la mano de JJ pasar por encima de la tela

—Te los dejaré algún día—dijo Amelie quitando la mano de JJ que se quedó quieto— Ahora no porque no llevo nada debajo—explicó inocentemente agarrando un par de platos

La cabeza de JJ rápidamente se la imaginó completamente desnuda provocando un pinchazo en su entrepierna

—Tengo que ir al baño— avisó JJ yendo hacia el baño sin dejar que Amelie contestase