ᴀɴɢᴇʟ // ᴊᴊ ᴍᴀʏʙᴀɴᴋ

XXII

—¿Tenéis algo para protegeros?

—Eh, estamos pensando en esa parte— contestó JJ, Mike tiró su brazo hacia atrás, dandole una bolsa de tela—. ¿Qué es esto?

—Machetes, los necesitareis— contestó Mike caminando hacia una barca—. Todo esto se añade a lo que ya me debes.

—¿A lo que...?— intentó decir Amelie, los nervios cosquilleando en su estomago mientras le daba una mirada rápida a JJ.

—He preguntado por ahí cómo llegar— siguió el hombre, Amelie apretó las manos en puños—. Vuestros amigos y se han ido, pero me han indicado como llegar ahí.

—¿Nos va a cobrar también por eso?— susurró Amelie con molestia, colocándose junto JJ cuando este agarró el papel. El rubio le dio un codazo suave.

—Es muy vago, ya que solo José sabe como llegar, pero ya sabeis la zona.

—Algo es algo— comentó Cleo.

—Gracias.

—Oh, no me deis las gracias— alzó su mano Mike con una risa burlona—. Mejor rezad.

—Lo haremos— sonrió Amelie hacia el hombre que asintió—. Para que te calles de una puta vez, imbecil.

Cleo apretó sus labios con una sonrisa cuando el farfullo de la castaña salió de sus labios, entrando a la barca.

—Oye, JJ— Amelie miró sobre su hombro, viendo a su novio casi subido—. Me debes una que vale por diez.

JJ asintió con pesadez, pasando junto Amelie sin mirarla, pero sintiendo la mirada curiosa y preocupada de esta en él.

(...)

—Bonjour...

JJ quitó la mirada del agua y las llevó a Amelie, que se sentó a su lado. Todos estaban durmiendo y el rubio se había ofrecido a seguir navegando por la noche, no tenían tiempo que perder.

—Hey.

Amelie miró el agua y sus piernas subieron a la balda, su barbilla se apoyó en sus rodillas, y JJ la miró a ella. Seguía llevando aquella bandana que hacia que sus rostro se iluminada, tenia unas leves ojeras bajo sus ojos.

El chico, cuando se escondieron tras el puesto de María, había mirado sus muslos de nuevo, había nuevas marcas en ellos. Se sintió culpable al pensar que él no había estado cuando la chica se había puesto nerviosa hasta tal punto.

—¿No duermes?— preguntó JJ, Amelie volvió sus ojos a él y negó con su cabeza—. Deberías.

—Me apetece más hacerte compañía.

El corazón de JJ se aceleró y acabó por derretirse cuando Amelie le dio una sonrisa dulce. Sus ojos brillando al mirarle y sonrojándose levemente ante la mirada de este en ella.

La mano de JJ fue al tobillo de la castaña, que rio un poco cuando el chico hizo fuerza hacia sí mismo, pidiéndole de manera silenciosa que se acercara a él, cosa que hizo. Los muslos de Amelie quedaron encima de los del rubio, que pasó su mano por la espalda baja de su novia, quien rio débilmente, sus manos se apoyaron en el hueco que sus piernas hacían.

—¿Que te parece Sudamerica?— preguntó JJ, su mano fue al pelo que se apoyaba en los hombros de Amelie y bajaba por su espalda.

—La gente es amable.

—Si, he visto que has hecho dos amigos...— Amelie aguantó su risa ante el tono del rubio, que llevó su mano a la nuca de la castaña.

—En diez minutos— punteó ella, JJ pasó la lengua por sus dientes con irritación que Amelie le estaba provocando a propósito—. Llego a estar diez más y me caso.