Me despierto en una habitación del hospital, mi muñeca y pierna aún arden. Tengo un suero intravenoso en mi brazo y aún no entiendo lo que pasó. La puerta se abre y entra Matías.
Matías- mamá... ¿Por qué?
Dice con su voz quebrada y finalmente llorando. Llora muy preocupado y se acerca más a mi.
Silvia- ¿De que hablas?
Matías- yo juro que me voy a portar bien y no voy a ser grosero contigo, voy a ir a la universidad todos los días, nada de fiestas... Ya me dejó mamá, ¿ahora tú también me quieres abandonar?
Silvia- no mi amor... Yo jamás te voy a abandonar.
Matías- ¿Entonces por que te cortaste las venas?
Silvia- ¿Que?... Yo jamás haría eso.
Matías- lo hiciste... Y estoy muy triste.
Silvia- Mi amor, mírame bien a los ojos...
Alcanzo a tomar su rostro por sus mejillas, sus ojos verdes me miran con súplica.
Silvia- jamás haría algo así. ¿Me crees?
Matías- Si... De todos modos si lo hubieras hecho yo te habría ayudado para que no lo vuelvas a hacer.
Silvia- te amo con todo mi corazón. Necesito que vayas a casa y te quedes allá con Jen.
Matias- está bien... Vuelve pronto.
Silvia- ah... Cuando llegues a casa no toques nada de mi habitación hasta que lleguen algunos oficiales.
Matías- ¿Por qué?
Silvia- luego te explico. Ve a decirle a Jen que te lleve a casa a ti y a Jonás.
Matías- ok.
Matías me dá un beso en la frente y se va lento con su sonrisa dibujada en su rostro. Luego de él entra Cristian.
Cristian- Si te pasa algo yo me muero Silvia.
Dice llorando y juro que me parte el alma verlo así. Su rostro luce pálido y su camisa tiene sangre. Mi sangre.
Cristian- juro que no insisto más. Iremos despacio y nos conoceremos aún más. No sé pronunciará más la palabra "casamiento"...
Silvia- shh... Amor.
El continúa hablando y veo en su mirada que se siente culpabe. Culpable de algo que él no hizo.
Cristian- No podré soportar que te vayas para siempre.
Silvia- amor... Ven, recuestate conmigo.
Cristian- Te puedo lastimar.
Silvia- No. Vente.
Él con mucho cuidado se acomoda a mi lado y me abraza.
Cristian- Prométeme que no lo volverás a hacer.
Silvia- Te lo prometo.
Cristian- Una promesa creíble.
Silvia- te prometo por lo que más amo en este mundo que son mi familia y tú... Que no lo haré nunca más.
Cristian- está bien. Me quedo más tranquilo.
Silvia- Dime qué pasó.
Cristian- yo llegue y estabas cubierta por una manta, no me di cuenta. Te abrace hasta que te despertaste y me pediste que no te soltará, allí fue me di cuenta que estabas sangrando. Tenías las venas cortadas y la pierna. Estabas sangrando y una cuchilla cerca de tu mano.
Silvia- Perdóname por la imagen que tuviste que ver.
Cristian- pensé que te ibas a morir. Y yo me iba a morir contigo.
Silvia- Pero ya viste que no me paso nada. Tú tranquilo.
Cristian- no puedo... Primero mi hermano y ahora tú... Yo no...
Silvia- yo no lo hice... Jamás haría algo así, tuve problemas más serios que nuestra ridícula discusión. No fue por ti. Yo no me lastimaria el cuerpo porque me encanta mi cuerpo y además trabajo con el. Debo cuidarlo y no permitir que me sucedan estas cosas. Ahora debería hacer fotos y videos de un reloj de lujo. ¿Tú crees que arriesgaría esa oportunidad?
Cristian- ¿Entonces?
Silvia- Ya no me darán ese comercial. Con lo que me costó. Hasta ahora lo pensé, me van a matar.
Cristian- eso es lo que menos importa ahora.
Silvia- es mi trabajo Cristian.
Cristian- lo siento... Pero no entiendo lo demás.
Silvia- Si tú entraste por mi ventana, alguien más pudo entrar... Justo antes de ti.
Cristian- ¿Quien?
Silvia- alguien que quiera verme muerta. Alguien que ya haya intentado matarme.
Cristian- Bianca... Pero ahora lo arreglo.
Dice levantándose y caminando hasta la puerta. Me levanto rápidamente detrás de el y lo detengo.
Silvia- No. Déjamelo a mí. Solo préstame tu teléfono... ¡Ay!.
Gimo del dolor, mis lágrimas caen sobre mis mejillas y veo que mis muñecas sangran y mi pierna también.
Juan- perdóneme por favor. Perdón.
Dice Juan preocupado, está con una enfermera, supongo que estaba paseando.
Silvia- me duele.
Cristian- voy por una enfermera.
El corre mientras Juan me acompaña a recostarme. Me acaricia la mejilla y lloro aún más porque sé que no me reconoce. Pero que aún así siente compación por mi.
Juan- debió ser difícil para ti todo lo que te dije. Pero es horrible tener una laguna en la mente y no saber que es verdad y que no. Me dolió verla llorando y perdón.
Silvia- Tú no tienes la culpa. Pero... ¿Te puedo pedir algo?
Juan- lo que quieras.
Silvia- ¿Me puedes abrazar?
Juan- claro.
Él me abraza y lloro en silencio para no preocuparlo. Luego cuando llega la enfermera el tiene que salir. Besa mi mejilla y se va. Mientras la enfermera me cura la herida lloro sin control.
Enfermera- se tiene que tranquilizar señora, sino debemos ponerle un tranquilizante.
Silvia- No puedo.
La enfermera sale rápidamente mientras segundo después entra el doctor para ponerme un tranquilizante.
Silvia- Cristián.
Doctor- prometo hacer que pase. Ahora cierre sus ojos.
Cierro mis ojos, luego siento que ellos se van y entra Cristian. Siento el aroma de su perfume.
Silvia- un teléfono rápido. Por favor.
Él me entrega y abro mis ojos para marcar. Del otro lado responden y hablo rápidamente.
Silvia- Hola, soy Silvia Navarro. Alguien intento matarme. Vayan a la dirección que les dirá mi pareja y busquen huellas... Todo lo que puedan.
Sin más me quedo dormida profundamente.
*Abro mis ojos viendo que el sol ilumina pero aún así hace frío.
Silvia- tengo frío amor.
El se acerca y me cubre. Cristian me da besos en mi rostro y sonrio.
Silvia- ¿Que hora es?... Tengo hambre.
Cristian- 10 AM. Pediré que traigan el desayuno.
Silvia- Gracias amor... Cambia esa carita, yo no te voy a dejar amor.
Cristian- fue horrible verte así. Realmente pensé que te perdía.
Silvia- pero no fue así. Estoy aquí, para decirte y demostrarte lo mucho que te amo.
Cristian- también te amo amor.
Cristian se va y minutos después vuelve con alguien que me entrega el desayuno y luego se va.
Cristian- come todo.
Silvia- Acompáñame.
Cristian- no... Mejor come tú.
Silvia- no... Solo si tú comes conmigo.
Nora- No te preocupes porque el irá a cambiar su ropa por algo limpio. Yo me quedo contigo.
Silvia- Hola señora.
Nora- Hola bonita. ¿Cómo te sientes?
Silvia- arden pero mejor.
Nora- Cristian ve a casa báñate, cámbiate, come algo y vente luego.
Silvia- si, amor. Vete y has todo lo que dijo tu madre. Por favor.
Cristian- ok.
Silvia- te amo.
Cristian- también te amo.
El se va mientras su madre me mira las muñecas y se pierde en algún recuerdo.
Nora- ¿Que pasó?
Silvia- Bianca... Una mujer...
Nora- se quién es...
Silvia- ya intento matarme antes o al menos lastimarme. Me caí del caballo por su culpa. Ahora entró por la ventana de mi casa y me cortó.
Nora- está loca.
Silvia- supongo que fue ella. Lo confirmaremos en unas horas.
Nora- si es así ojalá que la encierren.
Silvia- yo no voy a parar hasta que esté en prisión.
Nora- por un momento pensé que tú...
Silvia- no, no lo haría. Mis hermanos se quedarían solos y no me lo perdonaría jamás.
Nora- es duro ver qué la persona que amas está apunto de suicidarse.
Silvia- lo dice por...
Nora- por mi hijo.
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Mi Salvación Eres Tú
FanfictionUna historia ficticia de Silvia Navarro y Cristian de a Fuente.