Cristian no me escucha solo camina hacia la salida, corro detrás de el porque camina tan rápido que no logro alcanzarlo.
Silvia- Oye, escúchame.
Cristian- Hablamos otro día.
Silvia- no, yo quiero explicarte ahora.
Cristian- y yo no quiero escucharte... Jamás dejaste de ser una mujer así.
Silvia- ¿Así?... ¿Así cómo?
Cristian- Adiós.
Silvia- ¿así de rápida?... ¿Una mujerzuela?
Cristian- yo no dije eso Silvia.
En el momento que el se acerca a mi, me alejo con un gesto serio y le doy la espalda. Escucho que me nombra pero solo camino. No quiero llorar pero mis lágrimas caen solas. Antes de entrar a la habitación de Juan me limpio las lágrimas y trato de sonreír. Él me observa y yo solo voy a sentarme.
Juan- ¿Discutieron?
Silvia- Si.
Juan- ¿Fue por mi?
Silvia- Oh, no... Fue por qué enfermera lo coqueteó y se le acercó.
Juan- Él te ama, no debes sentir celos.
Silvia- pero es muy guapo y las mujeres me lo quieren quitar.
Juan- Él solo tiene ojos para ti.
Silvia- ¿Tú crees que él quiera escucharme?... Quiero pedirle perdón.
Juan- si realmente le importas y te ama te va a escuchar. Escuchar no quiere decir perdonar pero al menos es un intento... Si, te va a escuchar, intenta hablar con él... Y si no funciona al menos hiciste todo de tu parte.
Silvia- tienes razón.La noche pasó muy rara, Cristian no responde mis mensajes y eso me lastima. Tengo ganas de ir a buscarlo, tengo ganas de llorar pero no puedo hacer ninguna de las dos cosas. Le envío un mensaje a Diego diciendo lo que Juan cree que discutimos, el no logra entender pero le diré mañana. Me quedo dormida muy tarde y levanto muy temprano con los gritos de Juan.
Juan- Niña... Se hará tarde para ir al colegio.
Silvia- Ok... Ya voy.
Rápidamente desayunamos y salgo para mi casa. Al llegar me baño y visto rápido. Veo a Jen a mis hermanos ya listos.
Jen- Cristian llegó anoche y se llevó su ropa.
Silvia- Ok. Vamos Jonas y Matías.
Matías- ¿cómo está Abue?
Silvia- Recordó algo pero piensa que soy una niña.
Jonás- pero lo eres.
Silvia- me refiero a que piensa que tengo 17 años.
Matías- Entonces cree que soy un niño aún.
Silvia- Si... Supongo que si vas a verlo te confundirá otra persona.
Matías- quiero verlo, por favor. Yo me haré pasar por un enfermero o tu amigo.
Silvia- Ok. Al salir del colegio te llevaré.
Silvia sube al auto y sus hermanos también. Allí le explica todo lo sucedido, también les dice lo que pasó con Cristian.
Matías- yo hablaré con él y le diré que...
Silvia- No. Mejor mantente al margen. Sabes que no todo dura para siempre.
Jonás- ¿osea que así nada más terminaron?
Silvia- No. Yo intentaré hacer que me escuche.
Jonás- Yo no lo perdono por pensar mal de tí. No estoy dispuesto a que todo sea como antes. Se ganó que no quiera nada con el. ¿Cómo puede pensar mal de tí?
Silvia- Jonás... Respeto tu opinión.
Jonás- Eres la mujer más buena del mundo... ¿Vas a rogarle todo el tiempo?
Silvia- No, está enojado y lo entiendo pero si no me quiere escuchar ya es su problema.
Jonás- Perfecto.
Él está serio y sonrió pero me preocupa que aún tenga esa actitud de ser el Hombre de la casa.
Jonás- Princesa... Denu irá por mi al colegio porque estamos en clase de baile juntos.
Silvia- que bien... Ok. Me encanta.
Jonás- Solo tienes que dejar de tratarme como si fuera un niño.
Silvia- Ok. Ah, me debes de para pagar la luz.
Jonás saca dinero y lo guarda en mi cartera. Luego dejo a ambos en su trabajo y universidad y voy a mi trabajo. Le pido a mi secretaria que encargue unas flores y lo mande a la dirección de Cristian con una tarjeta."Amor, te juro que todo tiene una explicación... Jamás te haría daño. Te amo"
Luego de una hora le pregunto si hizo lo que pedí y me confirma que ya llegó a su casa. Pero pasan las horas y no recibe respuesta. Voy por Matías al colegio y ya en el auto hablo con él.
Silvia- primero vamos a un lugar y logo a ver a Abue.
Matías- si mamá.
Llegamos a casa de Cristian, la empleada va por él y yo lo espero afuera mientas Matías me observa desde el carro.
Cristian sale y no me mira. Trato de darle un beso pero se corre y se lo doy en la mejilla.
Silvia- Diego es mi primer novio, vino porque Juan lo llamo.
Cristian- Y tú...
Silvia- no digas cosas de las cuales puedes arrepentirte.
Cristian- ahora no quiero hablar. Estoy en una reunión de negocios con...
Bianca- conmigo.
Silvia- ¿Tú eres...?
Bianca- Bianca... Mucho gusto.
Dice cínica, sonríe y se apoya a el brazo de el. Cristian no hace nada se queda en su lugar.
Silvia- ¿Es en serio Cristian?
Digo rascando mi cicatriz de la muñeca para que sepa de lo que hablo. Camino hasta mi auto pero el va detrás de mi.
Cristian- la reunión en con su padre, no se que hace ella aquí.
Silvia- ¿Por qué dejas que se te acerque tanto?... Ella va crear historias en su mente y nos hará mucho daño. Es una mujer peligrosa y tú solo alimentas eso.
Cristian- Eso mismo estamos hablando con el padre.
Subo al auto y veo que Matías tiene un gesto serio y no me dice nada. Trato de que no haga nada en contra de Cristian.
Silvia- todo está bien mi amor.
Matías- vamos a ver a Abue. Déjalo a el.
Silvia- si mi vida... ¿Puedes hacerte a un lado?
Cristian- debemos hablar.
Silvia- Ah, ¿ahora sí quieres?
Cristian- por favor.
Silvia- está bien pero no ahorita. Debo regresar con Abue, no quiero que se enoje conmigo y me castigue. Sabes perfecto lo mucho que me duele verlo así pero debo seguirle la corriente. Te enviaré un texto... Solo espero que me respondas.
No espero a que responda me alejo y conduzco hasta el hospital dándole indicaciones a Matías sobre que debemos hacer.
Matías- oye... No quiero ver más a Cristian cerca tuyo.
Silvia- ¿Viste a esa mujer?
Matías- si.
Silvia- jamás te acerques a esa mujer, si en algún momento la vez solo aléjate.
Matías- ok como tú digas.
Estaciono el auto y camino de la mano con él, voy al baño y me visto con ropa más cómoda y entramos juntos. Juan nos ve y sonríe ampliamente al ver a Matías, aún sin recordarlo. Cómo era de suponer cree que es un enfermero.
Matías- Holaa Señor Juan.
Juan- Hola muchacho... ¿Eres nuevo?
Matías- Si, hoy estaré un rato con usted. Espero que no le moleste.
Juan- por mi está perfecto... Es muy joven el enfermero.
Silvia- Si, pero tiene buenas referencias.
Juan- genial. ¿Tus hermanos?
Silvia- si, si vieras la madurez que tienen en estos momentos no lo reconocerias.
Juan- ¿Jen?
Silvia- Estudia, está en un curso de gastronomía... Dice que le encanta y que ya tiene su profesión.
Juan- yo lo intuía.
Silvia- ¿Cómo estás?
Juan- mucho mejor. ¿Pudiste aclarar todo con Diego?
Silvia- si, supongo que vendrá... Ya le dije que me tiene que aguantar con mis celos.
Juan- eres muy celosa... No deja que la vecina se me acerque.
Silvia- no exageres.
Ambos rieron y los veo tan felices que me quedaría todo el tiempo con ellos. Comemos algo y luego ambos juegan con las cartas. Golpean la puerta y veo que pasa Diego.
Silvia- Hola mi amorcito.
Diego- Holaa... No podemos estar así.
Silvia- lo sé... ¿Me perdonas?
Diego- Claro.
Silvia- (susurro) ojalá fuera así con Cristian.
Diego- ya hablaré con él.
Silvia- no.
Juan- perdonala pero es muy celosa.
Matías- holaaa...
Silvia- ¿Ya viste lo guapo que está el enfermero?
Digo haciendo un gesto para que entienda y nos siga la corriente.
Diego- si... Pero no más que yo.
Silvia- lo que tú digas... Nosotros vamos a estar aquí en la puerta.
Juan- ok.
Salimos tomados de la mano. El se recarga en la pared y lo observo.
Silvia- ¿Cómo está tu novia?
Diego- Está muy bien, ya llegó y le expliqué todo.
Silvia- ¿Se enojó?
Diego- No, pero creo que sería bueno que se conozcan.
Silvia- yo también lo creo... Le dije que no venga. ¿Que hace aquí?
Diego- ¿Quien?
Silvia- Cristián, es el que viene hacia nosotros. De camisa blanca.
Diego- Me dejas hablar con él.
Silvia- no...
Juan- Chivi... ¿Puedes venir?
Silvia- si. Ya voy... No dejes que pase.
Diego- ok. Tú tranquila.
Entro a la habitación lentamente mientras veo que Diego camina hacia Cristian y lo saluda amablemente mientras Cristian está muy serio. Me observa y luego observa a Diego con el ceño fruncido.
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Mi Salvación Eres Tú
Fiksi PenggemarUna historia ficticia de Silvia Navarro y Cristian de a Fuente.