¡No me casaré!💉
—Fue un placer hacer negocios con ustedes —Habla Zeus poniéndose de pie para despedir a sus nuevos clientes.
—Lo mismo digo, señor Zeus —Se despiden y estos abandonan la habitación.
—Kimberly, cancela mis próximas reuniones, me duele la cabeza —Se levanta de la silla en la que estaba sentado con intención de salir de la sala de reuniones, pero la voz de su asistente se lo impide.
—Sus abuelos están aquí —Le informa.
—¿Dijeron que quieren?
—No.
—Diles que vallan a mi oficina.
—Ok —Saca su teléfono de su bolsillo al recibir un mensaje de Anthony.
La señorita
Amethyst ya está
en el departamento.
Por lo que escuché,
se daría una ducha
para luego almorzar.No responde y camina a su oficina donde ve a sus abuelos paternos.
—Buenas tardes —Saluda y camina hacia su escritorio. —Espero que estén aquí por una emergencia, de lo contrario, pueden marcharse —Habla frívolo. Siente tanto deseo de llegar a casa y estar con la mujer más sexy de todas que en esos momentos no mide su carácter o sus palabras.
—¡No seas grosero! —Le reprocha su abuela.
—No tengo tiempo. ¿Qué desean? —Se sienta frente a ellos.
—Se acabó tu tiempo —Escupe el abuelo.
—¿De qué hablas?
—Bueno, como sabes, te dimos algunos meses para que encontrarás a una mujer que acceda a casarse contigo y como no lo has hecho, nosotros nos encargamos de ello.
—Pierdes tu tiempo, tengo novia —Se levanta y comienza a recoger sus pertenencias.
—Novia y prometida son dos cosas diferentes. Pídele matrimonio y si no acepta, Rachell está dispuesta a casarse contigo.
—¿Rachell, la hija de Dionisio? —Cuestiona sin poder creerlo. Rachell era una de esas niñas creídas y exageradas del instituto. La conoció cuando él tenía 18 y ella 16, en ese instante se odiaron hasta la actualidad. —Esa chica me odia. ¿Por qué querría casarse conmigo? —La pregunta sale sola de sus labios.
—Bueno, con tu abuelo le platicamos los beneficios que obtendría al casarse contigo —Dice la señora como si aquel fuera uno de los temas con menos interés para ellos.
—¿Cómo pueden ser tan desalmados? —Siempre ha respetado a sus abuelos, estos fueron quienes, prácticamente, lo criaron aunque siempre ha tenido una opinión sobre ellos. —Ustedes se casaron con amor de por medio, tuvieron un hijo que anhelaban para completar a su familia, pero cuando esté creció, lo condenaron a un matrimonio vacío y de igual manera condenaron a mi madre —Deja de recoger sus pertenencias para mirarlos fijamente antes de decir las próximas palabras. —Por vuestra culpa, mi madre es una alcohólica empedernida y una mala madre y ahora pretenden condenarme a mí. No me importa vuestra herencia, no me importa vuestro legado, no me casaré con otra mujer que no sea mi novia y aún no hemos hablado de dicho tema ni planeo hacerlo por ahora.
—Pues lo vas a hacer porque somos tus abuelos y el lugar donde está parado justo ahora me pertenece.
—¡No me voy a casar! —Ruge con rabia. —¿Quieres sacarme de tu empresa? Perfecto, me largo —Camina hacia la puerta y sale de la oficina sin mirar atrás. Sube a su deportivo y maneja hasta su edificio.
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Cúrame el alma
Teen FictionUna noche, una fiesta, una botella de vodka, un accidente y un desconocido. Aquella noche sería la noche más feliz de su vida para Amethyst, su cumpleaños número 32, pero aquellos planes terminaron cuando vio a su prima cogiendo con su pareja. ¿Qué...