Cúrame el alma

Capítulo 6

Rompiendo barreras💉

—Muy bien, el señor Russo y yo hablaremos con la prensa. Le diremos que la señorita Hera fue atropellada por un tipo y este se fue a la fuga, nada más —Informa Carla. En estos momento se encuentra la pequeña familia poniéndose de acuerdo respecto a lo que le dirán a la prensa. —Lo último que necesitamos es que la prensa sepa que Hera quedó embarazada sin casarse...

—Tampoco necesitamos que usted abra la boca para tirar su veneno —Responde Ares dándole una mirada de odio.

—Entiendo que es una situación estresante, pido una disculpa si mi comentario estuvo fuera de lugar —Trata de escucharse arrepentida, pero su rostro es de orgullo. Orgullo porque conoce todos los secretos familiares y sabe perfectamente como para destruirlos a cada uno sino consigue lo que quiere, y eso es estar junto a Octavio Russo. —Necesitamos hablar con la doctora para ponernos de acuerdo ya que daremos su nombre como referencia de quién fue el cirujano que la operó.

—¿Zeus, puedes buscar a tu amiguita? —Cuestiona su madre.

—Sí, iré por la doctora —Sale de la habitación y va a emergencias donde ve a la hermosa castaña atendiendo a un paciente. —Doctora Williams, necesitamos hablar.

—Mmm... Dame unos minutos —Responde sin apartar la mirada del pequeño delante de ella. —Enfermera pida un quirófano y llame al doctor Martín —Se quita los guantes. —Si no operamos a este niño en menos de tres horas tendremos que amputar su pierna —Responde con tristeza y se acerca al ojiazul. —¿Qué necesita?

—Mis padres requieren su presencia. ¿Puede subir?

—Claro —Van hasta el ascensor que los lleva al quinto piso, caminan hasta la habitación y entran. —Buenos días. Supe que requieren de mi presencia, ¿De qué se trata?

—Necesitamos ponernos de acuerdo para cuando mi esposo y yo demos la cara ante la prensa —Habla la señora Russo con orgullo.

—No entiendo de que habla.

—Cuando mi cliente y su esposa hablen con la prensa les contarán que fue usted quien operó a vuestra hija y usted no dirá nada sobre el aborto... —Habla Carla con desagrado ya que la señora Celeste Russo ha insistido en salir con su marido cosa en lo que ella objetó, pero nadie la escuchó.

—Me va a disculpar señora, al igual que toda la familia, pero no es necesario que mencionen mi nombre. No quiero que lo hagan, no quiero tener nada que ver con vosotros luego de que firme el alta —Habla y la mirada del rubio inmediatamente se encuentra con la suya.

<<¿Eso quiere decir que no quiere tener nada conmigo? ¿No quiere descubrir si somos o no personas atadas por el mismo hilo?>>. Piensa mirándola fijamente.

—No le preguntamos, es su obligación como médica del sector privado y doctora de nuestra hija —Una enfermera entra en la habitación para revisar a la rubia.

—Señora Russo aunque sea la doctora de su hija no deseo que mencione mi nombre y de hacerlo, diré exactamente lo que pasó aunque eso conlleve una demanda y la perdida de mi licencia —Camina hacia la puerta.

—Quiero hablar con su jefe de forma inmediata.

—Ok. Enfermera, dígale al jefe que la señora lo requiere aquí —Le ordena a la enfermera.

—También la requiero a usted.

—Ok —Permanece fría frente a esta. Nunca se ha dejado amedrentar por nadie y en ese momento no lo hará.

A los pocos minutos aparece el jefe del cirugía.

—Buenos días, soy el jefe de cirugía Marcos Jiménez. ¿Qué pasa? —Pregunta este.