Capítulo 19

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            Sorprendida, Natalie se levantó.

            -¿Qué?

            -Que si estás bien… no sé, murmurabas cosas con los ojos cerrados y me preocupé.

            Natalie se lavó la cara y se miró en el espejo. Beverly estaba justo detrás mirándola preocupada. La chica trato de sonreír pero sus intentos fueron en vano.

            -La verdad es que no estoy bien, no sé lo que me está pasando- dijo Natalie girándose hacia Beverly.

            -¿Sucede algo? Puedes confiar en mí- dijo Beverly poniéndose a su lado.

            -Ribber está enamorado de mí…- susurró Natalie.

            Beverly la miró y asintió.

            -¿Por qué crees eso?

            -“Me estás volviendo loco, no hago más que pensar en ti…” Esta es una de las frases de una canción en la que cuenta todo lo que sintió cuando me conoció y lo que ha vivido conmigo hasta ahora, la acabo de leer.

            -¿Te ha escrito una canción? Impresionante. Eso nunca lo hizo con Gillian.

            Natalie la miró.

            -¿No?

            -No y si la hizo para ti es que es sincero lo que siente. ¿Tú no sientes lo mismo por él?

            La joven bajó la mirada dudando de qué contestar.

            -La verdad es que no lo sé… por un lado siendo cosas pero por otro no sé… cuando me besó, a mi mente vino la imagen de mi ex haciendo que me sintiera fatal.

            -¿Tu ex?

            -Sí, Drake Smith.

            -¿Es que aún sientes algo por él?

            Natalie se apartó para dar vueltas por la estancia.

            -Ese es el problema, que no sé lo que siento. Encima ahora con lo del bailes de la fiesta…

            -¿Baile?- le interrumpió Beverly- ¿Qué baile?

            La joven se detuvo y miró a la otra para luego apoyarse en el lavamanos.

            -Te voy a decir una cosa pero no se lo digas a nadie, por favor.

            -No diré nada, confía en mí.

            Sin mirarla, cerró los ojos y habló.

            -Mi rodilla está sana, nunca tuve una lesión. Me engañaron.

            Se mordió el labio inferior para contener las lágrimas. Beverly la miró sorprendida.

            -¿Qué?

            -Me hicieron creer que mi rodilla no tenía cura cuando estaba perfectamente… he vivido tres años engañada- las lágrimas comenzaron a rodar por sus mejillas- tres años de mentiras, sin poder hacer lo que realmente me apasiona…

            Agachó la cabeza sollozando. Beverly se acercó, agarró una de las manos de la joven apartándola del lavamanos y la abrazó con fuerza.

Bailes de PasiónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora