Pasaron dos días de la fiesta y los alumnos de la academia aún comentaban la aparición de aquella joven de la que nadie sabía nada.
Natalie oía comentarios por los pasillos que limpiaba y la hacían sonreír, era la comidilla de la academia en esos momentos aunque eso no había conseguido sacar de su mente la desaparición de los informes. Tenía que saber qué pasó con ellos y encontrarlos.
Los desaparecieron por alguna razón y ella lo averiguaría.
-Hola- dijeron tras ella, sorprendiéndola.
Natalie se giró y ante sí vio a Ribber apoyando un hombro en la pared y con las manos en los bolsillos. Una posición despreocupada.
-Hola…- respondió ella colocando el plumero en el carrito.
-¿Aún sigues limpiando?
-Algo tendré que hacer hasta el concurso y claro está si lo ganamos…
-Lo vamos a ganar, tenemos una buena coreografía y no complementamos a la perfección.
La joven avanzó y sonrió para sí. Decidió cambiar de tema a ver qué le decía sobre la misteriosa chica del baile. Se detuvo y lo miró. La estaba siguiendo.
-He oído que en la fiesta bailó una misteriosa chica y nadie sabe quién es… ¿es cierto?
Él la miró y la joven vio que se acordó de su encuentro en el hall.
-Sí, es verdad.
-¿No saben quién es? ¿Ni siquiera sospechan de alguien?
-No, las chicas de la academia aseguran no ser ellas aunque lo hubieran deseado por las miradas que les lanzábamos los chicos. Muchas parejas están enfadadas justamente por eso.
-Vaya, la curiosidad debe estar matándolos a todos.
-Probablemente sí…
-¿Y tú no sientes curiosidad? Yo sí la sentiría.
Ribber se llevó una mano a la mejilla donde la misteriosa joven lo había besado y aún podía sentir su cálido aliento allí.
-Bastante- respondió más para sí que para ella pero la chica lo oyó y se mordió el labio inferior para no contarle que la joven misteriosa era ella pero se contuvo.
Se giró y cogió un cepillo para comenzar a barrer el pasillo. Los dos permanecieron en silencio queriendo decirse miles de cosas pero sin atreverse a hacerlo.
Él abrió la boca para decirle algo pero la cerró. Deseaba decirle que no era el mismo desde que la había conocido y que la necesitaba, que no dejaba de pensar en ella. Que se estaba volviendo loco de amor por ella pero no podía decirle eso cuando ella fue quien los separó cuando la besó.
Finalmente optó por preguntarle sobre el ensayo de esa noche.
-¿Quedamos a la misma hora de siempre esta noche o quedamos antes? Apenas quedan unos días para el concurso y sería mejor ensayar un poco más, hay que mejorar algunas cosas.
Natalie lo miró por un momento y a su mente vino aquella imagen de él vestido de príncipe cuando le dijo que quería saber quién era ella. Se estaba perdiendo en su mirada y no recordaba la pregunta que él le acababa de hacer.
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Bailes de Pasión
RomanceNathalie era una joven bailarina con un maravilloso futuro por delante pero un día ese sueño se ve truncado tras una aparatosa caída que le impide volver a bailar ahora trabaja en la academia de su padre, fallecido en un misterioso accidente de tráf...