PSICÓPATA || JAEDEN MARTELL

37

El día Jueves fue muy tranquilo, la verdad no pude presentarle a Millie a los chicos porque tenía clases extras y estaba muy ocupada.
Pero por fin era viernes, uno de mis días favoritos, la verdad no suelo hacer casi nada ni salir con alguien pero por eso me encanta, porque descanso lo mayor posible que pueda.

—¿Qué tal?— llego Jaeden cerrando la puerta de mi casillero para que pusiera mi atención en él.

—Hola Jae— me entró una oleada fría porque me puse nerviosa.

—Ya no me contaste como te había ido con tu amiga.... ¿Lili?

—Millie— corregí, él asintió— pues me fue muy bien, tenemos tantas cosas en común que me encantó haberla conocido— sonreí mientras me recargaba en mi casillero.

—Que bueno que vayas haciendo más amigos, porque la verdad a veces me cansó de ti— dijo sarcástico.

—Cállate Martell, si te encanta estar conmigo.

—La verdad es que si— se acercó un poco más a mi — y más que hoy vamos a salir juntos— lo sentía a centímetros de mi.

Ahora si que estaba nerviosa, jamás había estado así junto a él, ni él se comportaba así conmigo.

—¡_________! que bueno que te encuentro—una voz femenina nos sorprendió haciendo que nos separáramos.

—¡Millie, que gusto! — me hice a un lado de Jaeden para acercarme a ella.

—¿Quieres salir hoy? es que la verdad los viernes me aburro más que de costumbre.

—¿Hoy?— pregunté— es que la verdad ya tenía planes con Jaeden, pero si quieres mañana.

Vi como el rostro de Millie se entristecía, y recordé que ella quería conocerlo.

—Claro, lo siento— aclaré mi garganta—Millie él es Jaeden, Jaeden ella es Millie de la que tanto te platico.

—Un gusto— Jaeden sacó su mano de su bolsa de pantalón para saludarla.

—Hola— dijo Millie mientras lo veía sonriendo y respondía el saludo con su mano torpemente.

—No te preocupes _______, si quieres sal con ella y tú y yo nos vemos mañana.

—Pero estabas muy emocionado por hoy—dije.

—En serio, no hay problema. Nos vemos en la salida para llevarte a casa, ¿esta bien? —me guiño el ojo.

—Por supuesto Jae, no vemos.

Voltee y vi como Millie seguía en su mundo mientras veía a Jaeden irse.

—Es tan guapo—soltó ella.

—Mills— le di un pequeño golpe con mi codo— se ha ido.

—Lo siento, es que ________, ¿de donde sacas amigos tan guapos?, amo vivir aquí.

Solo reí ante su cometario y empezamos a caminar hacia el salón.

(...)

Millie y yo estábamos en la cafetería comiendo tranquilamente hasta que llegaron los chicos.

—Hola— saludo Wyatt mientras se sentaba a lado mío.

—Quitate Finn, ahí voy yo— dijo Jack.

—No veo tu nombre, así que este lugar es mío y te aguantas.

—¡Pero sabes que me toca sentarme a mi hoy ahí!— reclamó Jack.

—Pues será después porque yo de aquí no me muevo.

—Como te odio— Jack se movió de lugar indignado.