Traducciones Fanfics Donald Duck

Paz después del caos (Storkules x Donald)

Advertencia: En este cap, aparte de haber BL, habrá mediano nsfw, si no te gusta, lee el siguiente cap que será un poco más "sano" (Por así decirlo), sin más, disfruten.

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La cigüeña ha estado caminando en círculos desde que recibió la noticia. Tuvo que ir a un oráculo para recibir noticias sobre Donald. La buena noticia era que no estaba luchando contra la invasión lunar, la mala noticia era que estaba perdido solo en una isla desierta, comiendo arena. Della lo encontró y poco después lo hicieron los otros dos primos.

Su padre no lo dejó salir para nada, no para ayudar a la familia de Scrooge y tuvo que esperar pacientemente para escuchar lo que estaba pasando. Al final lo lograron, ganaron como siempre lo hacen, pero incluso si esto es un hecho, no eliminará la ansiedad que llenaba cada hueso de su ser inmortal. Una vez que terminó y con la ayuda de Selene, logró escapar de Zeus para llegar a Duckburg.

Llegó un par de días después, es solo un semidiós, solo se puede pedir hasta cierto punto, especialmente evitando a su padre y pidiendo que lo lleve a botes y cruceros y lo que sea que pueda. La bahía brillaba con el sol, se veía pacífica y la gente se veía feliz charlando sobre cualquier cosa que se les ocurriera, se abrió paso a través de los muelles y muchos barcos y marineros, pero realmente no le importaba ninguno de ellos, el marinero que él estaba buscando que sabía que no estaba allí, tenía que ir a la cima de la colina de Duckburg, donde la mansión estaba a la vista de todos, así que comenzó su caminata.

La ciudad no era particularmente grande, pero aun así tardó todo el día en llegar, porque cuando llegó a la entrada, el sol ya se estaba poniendo. Della lo dejó entrar mientras salía con los chicos, todos se alegraron de verlo y lo invitaron a quedarse. Siguió el camino hasta que llegó a la puerta, pero sabía adónde ir, así que en lugar de tocar el timbre, dio la vuelta a la casa para encontrar una piscina en el patio trasero y allí el bote donde vivía Donald. Entró y lo encontró limpiando y cantando. Donald no cantaba, incluso en su grupo se limitaba a sus instrumentos, pero para Storkules era como escuchar las canciones de Mermaid. Se quedó allí, esperando hasta que Donald notó su presencia. "¿Storkules? ¿Qué estás haciendo aquí?"

Tan pronto como escuchó su nombre por el pico, sus ojos se humedecieron y un par de lágrimas cayeron por sus mejillas. Abrió los brazos y corrió a abrazar al pato. Donald luego de ver esa mirada decidió un segundo después abrazarlo también, acariciando su cabello rubio y espalda tratando de calmar el llanto "¿Qué pasó?" dijo en voz baja al oído y esto hizo que el inmortal se soltara, se frotó la cara como un niño y se sentó de costado en una silla a la mesa para enfrentar a Donald. "¡Estaba tan preocupado que te vi comer arena! Y luego papá no me dejó salir a ayudar. Pensé que nunca te volvería a ver cuando despegaste en la nave espacial "

Donald no pudo evitar una mirada dulce en su rostro, no importa lo molesto que este pájaro pudiera ser, siempre demostró que lo quería. "¡Oh, pero estoy bien! ¡Se necesita más que eso para derribarme! " Storkules no pudo evitar reírse un poco de ese alarde. Extendió sus manos para tomar la de Donald que fue recibida de la misma manera. Los dedos entrelazados y los más fuertes descansan su cabeza en el pecho de marinero "Me alegro que estés bien"

Se quedaron allí un rato, en silencio, el semidiós jugando con sus manos "¿Qué tal si hago algo de cena?" Donald dijo dando un paso atrás para mirar al griego, quien solo asintió con entusiasmo porque Donald estaba cocinando para él. Comieron y luego se trasladaron al diminuto sofá que Donald consiguió para que los niños vieran la televisión, lo encendieron pero en realidad no estaban mirando, hablaron, esto es lo más contemporáneo que el pato ha visto Storkules. Cuando le dijo las cosas que tenía que hacer para llegar allí, Donald sintió un dolor agudo en el pecho y sonrió con tristeza. "Oh, lamento causarte tantos problemas"

"Cruzaría el universo y me enfrentaría a las bestias más terribles para verte" La antigua Grecia en él se mostraba con una pequeña sonrisa y Donald se reía ante la representación teatral ligeramente sonrojada "Oh, cállate. ¿Te quedas a pasar la noche? Puedo conseguirte una habitación en la mansión "

"En realidad, no me siento muy cómodo con Scrooge, y si papá me ve..."

"Bueno, puedes quedarte aquí si no te molesta el pequeño sofá"

"Está bien, gracias"

Se quedaron en silencio por un minuto, mirándose el uno al otro. Storkules tomó la iniciativa y se apoyó un poco demasiado desesperado para besarlo. Donald se sorprendió por un segundo, pero se rindió de inmediato, rodeando el fuerte cuello con los brazos, cerrando los ojos y abriendo el pico. La cigüeña se inclinó sobre él, empujándolo tan levemente para dejarlo en el sofá. Donald se pasó las manos por cada parte de la espalda que pudo alcanzar mientras el más fuerte hacía todo lo que quería con la boca. No mucho más pudieron sentir que se endurecían mientras subía el calor. Donald enredó sus piernas alrededor de las de Storkules mientras el más grande empujaba un poco para causar cierta fricción entre sus entrepiernas. Un grito ahogado se le escapó al pato ante el movimiento mientras se iban incorporando al ritmo poco a poco.

A medida que el placer crecía, los jadeos crecían, no se atreverían a dejar salir nada más fuerte que eso por el miedo a ser escuchado por uno de los niños que pudo haber estado rondando el patio trasero. Donald se aferraba con vida a la espalda de su compañero cada vez que se atrevía a tirar un poco de su cabeza a cada lado, y pronto hubo escalofríos recorriendo sus cuerpos una y otra vez con cada embestida, estaban jadeando el uno contra el otro y El alivio de Storkules fue lo primero, Don tuvo que hacer un poco más para terminar, pero no tomó mucho tiempo. Storkules se dejó descansar uno encima del otro y Donald le acarició el cabello con suavidad. El semidiós miró al otro por el rabillo del ojo suavemente mientras el pato le devolvía la mirada tan amorosamente como siempre. Se abrazaron y se durmieron allí mismo en el sofá.

A la mañana siguiente, Donald se despertó con un fuerte rayo de sol y el olor a panqueques, se volvió para ver a la cigüeña preparando el desayuno para un ejército y sonrió. Quizás no sería tan malo tenerlo cerca

No olviden apoyar el original, acá dejo el link del libro en inglés ->

Autor: Zyrann

1133 palabras.