C I N C O

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El chico le jaló con fuerza, procurando no lastimar su piel, ambos cayeron al piso en cuanto ella estuvo arriba de fuera de peligro

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El chico le jaló con fuerza, procurando no lastimar su piel, ambos cayeron al piso en cuanto ella estuvo arriba de fuera de peligro. La luz al fin pudo iluminar su rostro y BonHwa sintió un pequeño alivio al ver a Jungkook a su lado.

—¿Qué estabas haciendo, BonHwa? – Jungkook se levantó del suelo para después ayudarla – ¿No pensaste en las personas que amas y que te aman?

—No puedo amar y nadie me ama en éstas condiciones, Kook – ella le miró con los ojos llorosos – todo ha empeorado y ya no soporto más.

Jungkook se acercó a ella y le abrazó con suavidad.

—Tu sabes que siempre voy a amarte, ¿No es así? – ella sonrió con melancolía y con dolor a la vez, era un momento tan agridulce en su vida que jamás iba a olvidar.

BonHwa se encontraba en su último año escolar, era una chica solitaria y misteriosa para todos, a excepción de unos cuantos que habían trabajado con ella en algunos proyectos, decían que era muy tímida y callada, sólo hablaba para lo estrictamente necesario, en cambio Jungkook solía ser el centro de atención de la escuela, aunque no le gustara. Ambos se conocieron debido a que Jungkook había sido asignado como un tutor para ella, todas las tardes solían ir a un café cerca de la escuela a estudiar mientras bebían un delicioso chocolate caliente, entre risas, pláticas triviales y la escuela se formó una amistad más allá de lo normal. Un pequeño noviazgo sorprendió a la gran mayoría de la escuela, aquel día había sido mágico para BonHwa. Se encontraba repasando para su próximo examen en el fresco y la sombra de un árbol en la escuela, sintió cómo ese aroma varonil que tanto amaba se había colocado junto a ella.

—Creí que estarías en clase – BonHwa cerró su libro para mirar a Jungkook – ¿Estás estudiando?

—Más tarde tengo examen de álgebra, ¿Ya lo presentaste? – él asintió.

La mirada acusadora de sus amigos incitándole a qué hiciera lo que iba a hacer, le puso aún más nervioso. Carraspeó un poco y miró la rosa blanca en sus manos para después ponerla frente a la chica.

—BonHwa, en éste tiempo me he dado cuenta que eres totalmente distinta a lo que todos dicen – su voz temblaba debido a su nerviosismo, haciendo sonreír a BonHwa – eres hermosa, alegre y muy especial para mí. Eres la persona que ocupo mi corazón sin mi permiso y estoy dispuesto a tomar los riesgos que vengan por ésta decisión. BonHwa, ¿Quieres ser mi novia?

—¿En verdad necesitas respuesta? – ambos sonrieron para unir sus labios y formar un beso.

El primer beso de ambos.

Los amigos de Jungkook festejaban a su lado porque su pequeño amigo al fin había podido encontrar a una chica que le amara no por su popularidad, sino por el corazón de oro que poseía. No obstante, los primos de BonHwa les observaban de lejos tomando incluso algunas fotografías, que posteriormente le mostraron a SeoHo. El hombre notó como su hija no pasaba tiempo en casa y no podía hacer las cosas que le correspondían, así pasaron algunos meses de felicidad absoluta para BonHwa, hizo algunos amigos y sentía que todo parecía mejorar en su vida. Hasta ese día en que su felicidad, se convirtió en su tristeza.

Flores blancas tintadas de su sangre, golpes y más dolor finalizaron abruptamente su mágico momento.

En una cena en la casa de Jungkook junto a sus padres, SeoHo irrumpió con violencia el lugar, golpeando tanto a Jungkook como a su padre cuando el primero colocó a su novia detrás de él, las lágrimas de BonHwa no paraban de fluir y los llamados de auxilio cuando su padre le jalaba hacia la salida con rudeza parecieran no ser escuchados por los padres de Jungkook. Al llegar a casa, la típica rutina de golpes azotó el cuerpo de la chica, las flores blancas que su novio habían sido aplastadas por su padre y su sangre las manchaba. Días después intentó la hablar con los padres de Jungkook pero ellos le negaron la entrada y le pidieron alejarse de su hijo. Al día siguiente, se enteró por los amigos de Jungkook que se había cambiado a otra provincia, lejos de ahí.

La única persona además de SeokJin que logró amarla, le había sido arrebatada abruptamente por un padre enfermizo y por dos padres que deseaban mantener a salvo a su hijo de aquel círculo tóxico.

—No sabía nada de tí desde que te mudaste, supuse que habías conseguido a alguien mejor que yo – aspiró el aroma que tanto había extrañado – te lo mereces.

—No deseo estar junto a alguien que no seas tú – Jungkook tomó el mentón de BonHwa – no he dejado de amarte desde aquel día y créeme que jamás me perdonaré no defenderte mejor.

Sus labios volvieron a unirse después de tantos años sin verse, haciendo sentir especial a ambos, sin embargo, algo dentro de Jimin se rompió al verlos. Detuvo abruptamente su caminar con Taehyung, observando la sombra de ambos moverse con lentitud, sus ojos se cristalizaron y apretó entre sus manos los papeles que traía desde la estación. Jimin deseaba despejar su mente y regresaban a casa caminando cuando se toparon con la pareja ahí.

—Jimin...– Taehyung posó su mano en el hombro de Jimin pero éste la quitó con brusquedad.

—Ésto es mi culpa, Taehyung – sus nudillos ahora se tornaban de color blanco y su rostro rojo – Jungkook si estuvo para ella, como yo no pude hacerlo. No tiene caso que siga con ésto si ella es feliz ahora.

Siguió su camino pero Taehyung se adelantó y se colocó frente a él tomando sus hombros.

—Park Jimin no se rindió cuando su madre lo maltrataba, no se rindió cuando fue perseguido injustamente, no se rindió cuando creyó perder a su Omega – ambos se miraron fijamente – Park Jimin no se rindió cuando asesinaron a su Omega frente a sus ojos, buscó venganza hasta que la obtuvo.

—Ese Park Jimin ya no existe, murió en cuanto perdió a BonHwa – no pudo evitar sollozar – el remordimiento me está matando, Taehyung y no creo soportarlo por mucho más tiempo.

—No venimos a este mundo a pasear, ¿Cierto? – Taehyung suspiró – desde el principio supimos que era una lucha dura y aún así la aceptamos, ¿Te rendirás cuando apenas está comenzando la misión?

Jimin miró hacia el puente y con los ojos llorosos pudo notar como Jungkook y BonHwa parecían ser felices abrazados. Suspiró y limpió su rostro.

—Quizás no pueda ser feliz a su lado, pero procuraré que ella sea feliz, tal y como ella se lo merece.

—Recuperarán su amor – Taehyung le abrazó con suavidad – espera un poco más, todo se dará en su momento.

—Recuperarán su amor – Taehyung le abrazó con suavidad – espera un poco más, todo se dará en su momento

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¡Con ésto damos por terminado el maratón de Orbit! ❤️

Anticipen muchísimo lo que se viene, quizás la historia sea un poquito más corta, pero intensa uwu

¿Qué creen que siga después de ésto?

Los leo.❤️

Orbit » PJMDonde viven las historias. Descúbrelo ahora