O N C E

238 43 25
                                    

—¿Todo bien, BonHwa? – Jungkook frunció su ceño al ver a la chica pensativa – ¿Te hizo algo el detective?

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

—¿Todo bien, BonHwa? – Jungkook frunció su ceño al ver a la chica pensativa – ¿Te hizo algo el detective?

Habían transcurrido algunos días desde que tuvo el interrogatorio con Jimin, podría decirse que entablaron una cordial relación en tan poco tiempo, esa extraña comodidad seguía en su persona, hablaba la mayor parte de tiempo por mensajes con el rubio, a pesar de él tener tanto trabajo, siempre tenía algunos minutos para contestarle.

—En lo absoluto – suspiró, dudando sobre contarle sus verdaderos sentimientos – sólo que toda ésta situación me tiene tan abrumada que me pierdo en mis pensamientos.

—Sabes que puedes confiar en mí, Bon.

El celular de Jungkook empezó a vibrar en su pantalón, captando la atención de la chica. Observó el nombre en la pantalla y se debatió mentalmente durante algunos segundos entre contestar o no.

—¿No vas a atender la llamada? – él negó con la cabeza, apagó su teléfono y caminó hasta BonHwa para enredar sus brazos en su cintura.

—Tú eres más importante, preciosa – colocó su mentón sobre el hombro de la chica – deberíamos llevar nuestra relación a otro nivel, ¿No lo crees?

—¿Qué tipo de nivel?

Jungkook comenzó a depositar besos en el cuello de la chica, bajando suavemente hacia su clavícula, mordió el lóbulo de su oreja con suavidad, haciendo sentir incómoda a BonHwa.

—Sé que lo deseas, BonHwa – susurró en su oído – vamos a la recámara, estaremos más cómodos.

Giró con suavidad el cuerpo de la chica, besando sus labios con rudeza, posteriormente metió sus manos debajo de su blusa para tomar su cintura y comenzar a desabotonar la prenda.

—Jungkook...– susurró BonHwa – no me siento lista para hacerlo.

—Seré la persona más delicada que jamás hayas visto, bebé – ambos se vieron a los ojos – no arruines éste momento, ¿Si?

Siguió besando su piel, creando un camino de besos desde su cuello hasta su ombligo. Iba a proceder a quitar el broche de su sostén cuando ella lo detuvo nuevamente.

—No voy a hacerlo, Jungkook – BonHwa frunció su ceño, apartando su cuerpo del de Jungkook – no quiero.

Ella se dió la vuelta para sentarse en el sofá, sin embargo, él tomó su brazo con fuerza, haciéndola girar hasta quedar cara a cara.

—Es lo menos que puedes hacer por mi, después de haberte permitido que te quedaras en mi casa a salvo – ella forcejeó pero más incrementó su agarre – además, deberías complacerme cuando yo lo diga, después de todo, soy tu novio.

—No eres mi dueño, Jungkook, yo soy dueña de mi propio cuerpo – BonHwa frunció aún más su ceño – no puedes obligarme a hacer algo que no deseo.

Orbit » PJMDonde viven las historias. Descúbrelo ahora