La diosa luna no da segundas oportunidades, no obstante, decidió darle una nueva vida a Park Jimin para enmendar los errores del pasado.
Los papeles se han invertido ahora y Bae BonHwa ya no es la misma de antes, sin embargo, el destino era el mismo...
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BonHwa observaba todo a su alrededor, Japón era un país gigante y bellísimo ante los ojos de cualquier persona, lleno de edificios luminosos y muchas personas caminando de la mano de sus familias sonriendo por las calles.
Ella sería feliz si Jimin estuviera a su lado.
Su panorama era triste y frío, HyunJin tomándola posesivamente de la cintura mientras que a su lado estaba HaNa agarrando su mano como si fuese una madre cariñosa y amorosa con ella. Se sentía presa de la maldad de esos tres y que no tendría escapatoria nunca, no sabía hablar japonés y sólo sabía hablar algunas palabras del inglés que Jungkook le enseñó durante el tiempo que estuvieron juntos. La mascarilla sobre su rostro solamente dejaba a la vista sus ojos y con ellos intentaba ver a las personas como una llamada de emergencia, pero simplemente la miraban con asombro por tener rasgos extranjeros y por lo apuesto que se veía su acompañante, sin saber la verdad detrás de esa falsa sonrisa que HyunJin mostraba.
Se motivó a ella misma a pensar en una solución, notó como cada vez se alejaban más de los centros comerciales y de la gente, el pánico se apoderó de ella y miró hacia todas partes visualizando a una persona que pudiera ayudarla, a lo lejos pudo distinguir a una chica delgada de cabello negro con un flequillo cubriendo su frente caminaba mirando su teléfono mientras bebía una malteada, a su lado también parecía estar otra chica rubia acompañándola, HyunJin notó sus intenciones y aprisionó más su cintura, haciendo que ella jadeara sorprendida.
—Si quieres sobrevivir no hagas nada estúpido – se acercó a su oído – sé que Jimin vendrá por ti y no dudaré ni dos segundos en asesinarlo.
—Atrévete a hacerlo, que yo misma me encargaré de matarte a ti si eso sucede – se soltó de su agarre – recuerda lo que te dije en el avión.
Pensó en otra alternativa para captar la atención de las chicas, así que con toda la intención, soltó su cubrebocas y dejó que volara hacia su dirección, caminó un poco más adelante de los adultos ganándose las miradas acusatorias de ellos.
—Yua, cariño – habló HaNa en un fluido japonés – ven aquí.
Supo que la llamaban porque distinguió su nuevo nombre en la boca de su madre, sin embargo, avanzó más mientras ignoraba la voz de JiHwan y HyunJin llamándole. Logró toparse con ambas chicas, quienes la miraron con extrañeza, la pelinegra se agachó y le entregó el cubrebocas a BonHwa.
—Ayúdenme...– susurró en coreano, teniendo la esperanza que pudieran entenderla – por favor, ayúdenme.
—¿Eres coreana? – la rubia pareció entenderla y ver el temor en la mirada de la chica – ¿Qué sucede?
—Dime tu nombre – la otra le miró preocupada al ver que el joven que la acompañaba iba a hacia ellas con un rostro de desagrado – házlo, ya.
—Bae BonHwa.
—Yua, mi amor – HyunJin colocó sus manos en sus hombros apretándolos con fuerza – date prisa, nos retrasaremos.
Se dieron la vuelta y ambas chicas notaron la decepción en el rostro de BonHwa, así que una de ellas tomó la iniciativa de hacer algo que la pudiera mantener cerca de ella.
