𝑇𝑟𝑒𝑎𝑠𝑢𝑟𝑒 𝐼𝑛 𝐿𝑜𝑣𝑒

𝑺𝒐𝒎𝒆𝒐𝒏𝒆 𝑻𝒐 𝒀𝒐𝒖

-Hᴀʀᴜᴛᴏ x Hʏᴜɴsᴜᴋ
-Rᴏᴍᴀɴᴄᴇ

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Haruto aun recordaba el día que conoció a Hyunsuk, tenían cuatro y seis años respectivamente y la familia del menor acababa de instalarse en la casa contigua a la de la familia Choi.

Recuerda cuando ese niño, en ese entonces, más alto que él se le acercó junto a su balón de futbol, se presentó como Hyunsuk y le pregunto si quería jugar con él.

Y así de fácil y simple, nació la amistad entre ambos.

Haruto aun recordaba todas las bromas pesadas que gastaban a sus familias (ninguna grave por suerte) e incluso recordaba aquel verano en Daegu cuando conoció al resto de la familia Choi.

Pero Haruto no podía recordar en qué momento se había enamorado.

Descubrir que estaba enamorado de un chico no había sido una gran revelación para él; pues gracias a las tardes que pasó viendo Austin & Ally con Hyunsuk se dio cuenta que, mientras el mayor siempre alagaba a Ally, Haruto apenas podía apartar la mirada del guapo rubio que interpretaba a Austin. Tras una charla con sus padres, el japones tuvo claro que a él le gustaban los chicos y decidió vivirlo de forma natural sin ningún tipo de salida de ningún mueble.

Pero descubrir que estaba enamorado de su mejor amigo había sido muy distinto, y todo había empezado cuando la conoció a ella.

La mañana de su primer día de high school, se había levantado emocionado y es que, después de dos años, volvía a estar junto a su mejor amigo (aunque este estaba a meses de graduarse).

Hyunsuk lo esperó en la puerta de su casa y se fueron juntos hacia la institución. Haruto miraba todo emocionado y sorprendido mientras Hyunsuk le hacia una pequeña guía por los pasillos.

-Esta es mi taquilla, deberías ir a secretaria para saber-El mayor no llego a terminar cuando un agudo chillido se hizo presente y Haruto vio a una chica abrazarse a su mejor amigo como si fuera su sustento para vivir.

-¡Ya estás aquí!-Otro chillido.-Te extrañé tanto, odio el verano solo porque no puedo verte.-Añadió la aún desconocida haciendo un puchero.

"Dramática."-Pensó el japones.

-¡Yerim! Yo también te extrañé.-Respondió Hyunsuk para abrazar fuertemente a la chica.

Haruto se sintió incomodo, no le gustaba lo íntimo que se veía ese abrazo.

-Oh, Ruto, perdón, te presento a Yerim.-Dijo Hyunsuk llamando la atención del menor.-Yerim él es Haruto, mi mejor amigo desde hace doce años.

La chica se separó de Hyunsuk y miró al japones, este hizo lo mismo: La chica era, sencillamente, preciosa. No era precisamente alta, quizá ni llegaba al metro sesenta, tenía el cabello por los hombros, de un color castaño muy natural, su piel no era muy pálida, pero era tan tersa que parecía una muñeca, también tenía un par de lunares, que se camuflaban bajo la fina base de maquillaje que llevaba, sus ojos eran bastante grandes y de un castaño similar al de su cabello, su nariz era pequeña y delicada, y sus labios eran gruesos, de un color frambuesa precioso.

Yerim le sonrió mostrando su, también, preciosa dentadura y achicando sus ojos casi hasta ser dos finas líneas para después tender la mano.

-Un gusto.-Añadió.

Haruto reaccionó justo a tiempo para estrechar la suya contra la de la joven y responderle:

-Igualmente.

Un incómodo silencio se formó entre los tres y por unos segundos nadie supo que decir.

-Ruto, deberías ir a secretaria por tu horario y para saber dónde queda tu taquilla.-Recomendó Hyunsuk rompiendo el silencio.