𝘈𝘍𝘛𝘌𝘙 𝘈𝘓𝘓 ☁︎ [#1]

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Klhoe Miller
"EL PRIMER DIA".

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Un primer día de clases es una de las peores experiencias que he tenido, y más siendo "la nueva", tener que hacer nuevos amigos, ver nuevos espacios, convivir con mas gente con dinero, intentar caerle bien a todos entre otras cosas.

Mi padre ayer estuvo solo hablando del instituto en la cena, del porque era una mejor opción, quedaba un poco retirado de la ciudad pero es el mejor, que hay familias muy poderosas como los Lombardi que tienen las mejores petroleras del país o que los Sallow son parte de la realeza británica, que esto, que lo otro, yo solo quiero disfrutar mi último año de instituto, es mi tercer cambio así que nunca he podido conseguir buenas amistades, además de que soy poco social, además que él deseo enfermizo de mi padre por llevarme a la cima de la élite del país no me ayuda mucho, aunque no fue una decisión mía cambiarme de instituto estoy intentando aceptarlo, convenciéndome que es por un mejor futuro, no entiendo porque simplemente no podía dejarme en donde estaba antes, pero según su discurso de ahí han salido mentes muy brillantes y así puedo rodearme con gente mucho más influyente lo que va a beneficiar mi futuro, como si desde que nací no estuviera privilegiada.

Termino de cepillar mi rubio cabellera, y en mi mente ya hay mil cosas en que pensar, son las siete de la mañana y me estoy muriendo de sueño, lo que no me ayuda ya que levantarme temprano nunca ha sido mi fuerte realmente.

Alisé mi cabello y le coloque unas ondas que combinan con el uniforme verde satinado que llevó puesto y también porque son mi look preferido, peiné mis cejas y les aplique un poco de sombra, delinee mis ojos y por último aplico gloss a mis labios. Al ponerme los zapatos posé en un espejo a la esquina de mi cuarto, mis ojos azules hoy tomaron protagonismo en mi, lo que me gusta, podrá no ser el mejor uniforme, pero me queda lindo.

—Adelante—ordenó al escuchar suaves golpes  a la puerta mientras termino de posar en el espejo.

—Hola señorita Klhoe—escucho una dulce voz que reconozco inmediatamente.

—Hola Bertha, buenos días—le respondo con una sonrisa.

—Buenos días mi niña, el desayuno está listo y tus padres te estan esperando—avisó acariciando mi mejilla.

—En unos segundos bajo— comento y ella desaparece tras la puerta.

Bertha ha trabajado toda su vida aquí, vio crecer a mi padre porque ella siempre venía con su madre a trabajar para mis abuelos y se convirtieron en parte de la familia luego viéndome crecer a mi. He vivido toda vida en esta casa, los abuelos antes de morir se la dejaron a mi padre y él se encargo de seguir el legado familiar, además nunca la remodeló o vendió por que es un recuerdo de ellos y de toda su infancia. Salí de la habitación y bajé las escaleras hasta llegar al "Gran salón" como lo llama papá; caminé hasta el comedor y arrastré mi silla sentándome frente a mi madre.

—Buenos días—comento viendo a mis padres susurrarse algo.

—Te ves hermosa hija—comenta mi mamá con una gran sonrisa.

—Gracias madre—respondo comiendo un bocado de mi desayuno

—Espero que te vaya muy bien en tu primer día, hija, recuerda que hay familias...—sigue mi padre con sus tema y lo interrumpo estresada.

—Muy poderosas—lanzo una mala mirada.— ¿Ya vas a empezar?, todo es un futuro para ti y yo solo quiero vivir el estúpido presente que es lo que tengo porque no se que pasará— reclamo en un tono obstinado mientras ellos me miran sorprendidos de mi manera de hablarle.—Perdonen mi tono pero enserio quiero disfrutar mi ultimo año, ni siquiera estoy en mi antiguo colegio porque decidiste cambiarme durante los últimos tres años, ni siquiera he podido conservar amistades, así que por favor déjame poder disfrutar esto sin estar pendiente a que será el mañana—reproche rápidamente sacando todo lo que me había envidado decir.