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Axel Davis.
"SIN AMOR POR AHORA".

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No sé porque parece que el tema nunca me abandona, yo queriendo olvidarla y la gente recordándomela.

—No quisiera hablar de eso, pero sí, aún la quiero, pero creo que eso no significa que pueda volver con ella—expliqué perdido en el fuego de la chimenea

—Lo siento sí duele que pregunte por eso pero-

—Tranquila—interrumpí deseando que deje el tema ahí.

—¿Qué hacen ahí?—llamó nuestra atención Dylan, lleva unos pantalones holgados y su definido torso desnudo.

—Estamos en una platica a las tres de la madrugada con chocolate, ¿nos acompañas?.

Dylan rascándose uno de sus ojos nos miró confundidos pero luego decidió sentarse al lado de Penelope tomándose de la mano, las anécdotas navideñas que nos han pasado salieron al aire como conversación, como la vez que Dylan disfrazó a su golden retriever de Santa claus y la lana hizo que le diera alergia, o cuando Penelope hizo un baile en el kinder y el miedo escénico le dio por llorar toda la presentación mientras sus compañeros bailaban, o yo una vez que de pequeño me tiré un taza de chocolate muy caliente encima y mis padres y yo terminamos en el hospital en navidad.

Y ahí en ese ambiente me doy cuenta que como hay personas que te hieren, otras son tu medicina, ojalá todas la personas consigan quién los acompañe en su insomnio a las tres de la madrugada con tazas de chocolates y los hagan sentir tan bien como Penelope y Dylan me hacen sentir.

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Estos días han sido mi cura, me he divertido demasiado, hemos horneado galletas, salido de compras, tomado fotos por las frías calles de la nevada ciudad y un sin fin de boberías como niños pequeños. Y me he sentido más calmado, mis pensamientos han evolucionado y sanado bastante, y siento que ya es hora de que un nuevo capitulo de mí vida empiece.

Sin amor por ahora, solo disfrutar de mi juventud.

—Abre el mío Dy—indiqué señalandole una caja de regalo color negro.

Es veinticinco de diciembre, navidad, luego de una deliciosa cena que prepararon para nosotros y haber llamado a nuestras familias para desearle felices fiestas estamos en la sala del penthouse, al lado del gran árbol de navidad que decoramos esta mañana, descalzos sobre la suave alfombra gris y nuestros lindos pero ridículos conjuntos de lana con temática de navidad abriendo nuestros regalos. Dylan tomó la caja y comenzó a abrirla rompiendo el papel de su envoltura, al abrir esa caja había otra un tanto más pequeño y de un material mucho más resistente, Dy abrió la caja y un hermoso reloj plateado iluminó sus ojos, sé que este le encantaría ya que Dylan tiene un obsesión con los relojes de mano.

De pequeños cuando me quedaba en su casa entrabamos al closet de su padre en la madrugada a probarnos todos sus relojes que nos quedaban extremadamente grandes, y ver la ilusión en sus ojos de que el reloj le gustó me hace muy feliz.

—Gracias Axel—agradeció mirando el reloj en su muñeca, para luego abrazarme.

—Bueno hora de mi regalo para mi mejor casualidad—habló mirando de la manera más dulce a mi mejor amigo quién la mira con una sonrisa y sus cachetes un tanto sonrojados.

—¿En serio nos pondremos así de cursis?— bromee recibiendo miradas serias por parte de los dos así que subí las manos en señal de paz.

Penelope señaló una de las cajas del árbol que Dylan agarró examinándola, es una caja pequeña que abrió con facilidad encontrándose un sobre de color blanco que dice feliz navidad en la parte inferior, al abrirlo y sacar el contenido sus ojos se entrecerraron como sí no pudiera creer lo que había visto.

𝘈𝘍𝘛𝘌𝘙 𝘈𝘓𝘓 ☁︎ [#1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora