two ways (Draco Malfoy)

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-Ya tengo lista la poción, tenéis los pelos de Crabbe y Goyle?- preguntó Hermione mirando a Harry y Ron quienes asintieron sin confianza alguna.

-Segura que esto funcionará?- preguntó el pelirrojo a lo que la castaña rodó los ojos.

Los ataques a los hijos de muggles seguían y nadie tenía respuestas ni soluciones. El trío de oro quería descubrir quién era el heredero de Salazar, querían saber sobre la cámara de los secretos, así que decidieron buscar algún candidato.

Quien mejor que la persona que odia a los hijos de muggles tanto como toda su familia?

Draco sin duda parecía saber algo.

Cuando Harry y Ron ya estaban preparados para ir en busca del platinado para preguntarle sobre el heredero, Hermione se quedó en el baño. Había tenido un... imprevisto.

-Bien, ahora debemos ir... a su sala común? No sabemos la contraseña Harry...- dijo Ron algo asustado.

-Vosotros, que hacéis fuera de vuestros aposentos?- preguntó nada más que Percy Wealse apareciendo.

-Eh...nosotros, caminábamos.- dijo Harry algo nervioso.
-Eso podía verlo, cuales son vuestros nombres?- preguntó el pelirrojo mayor con aires de superioridad.

-Crabbe! Goyle! Donde os habíais metido?- preguntó Draco apareciendo detrás de ellos.- Weasley, que haces aquí?- le preguntó.

-Malfoy, deberías tener más respeto. Soy prefecto así que puedo quitarte puntos, no lo olvides.- le espetó Percy con firmeza.

-Como sea...- dijo entonces miró a Goyle.- Por qué llevas gafas?- preguntó Draco a lo que Harry no supo otra cosa que hacer que quitárselas.

-Estaba leyendo.- dijo muy nervioso.
-Leyendo?- preguntó el platinado mirándolo muy extrañado.- No sabía que podías leer.

Ron miró a Percy quien ya los estaba mirando para pasar a Harry quién no le quitaba vista a Draco. El plan se estaba saliendo de control.

Cuando los tres chicos entraron a la sala común de Slytherin, Draco se sentó en uno de los sillones. Parecía más triste de lo normal.

-Estás bien?- le preguntó Harry a lo que Ron lo miró extrañado. Que estaba haciendo?
-Por qué tendría que estar mal Goyle?- preguntó el platinado rodando los ojos.

De su túnica sacó una de las cartas azules que tanya curiosidad y una sonrisa se apoderó de él cuando la leía.
-Que es?- preguntó Ron queriendo leer la carta.

-No es de tu incumbencia.- le dijo el platinado apartándola de golpe.- No importa, de todos modos.

-Claro que si. Es de tu novia Aria.- dijo Blaise apareciendo mientras lo molestaba.- Oh, Aria, como te quiero, bésame por favor, no te vayas...- decía haciendo gestos de amor y corazones.

Harry y Ron se miraron entre sí algo extrañados, Draco tenía novia? No era posible.
-Claro que no, solo dices bobadas.- dijo el platinado rodando los ojos.- Ahora cállate si no quieres dormir fuera.

Blaise se empezó a reír mientras imitaba que le daba besos hasta que Draco le tiró un cojín.
-Cámbienos de tema si?- preguntó mientras se sentaba en la mesa que había y empezaba a escribir.

-Si... habéis oído lo de los ataques?- preguntó Harry.- Draco, tu debes saber quién es el heredero... no es así?- le preguntó algo confuso.

-Qué?- dijo este siguiendo escribiendo la carta con entusiasmo.- No, no se nada, os lo dije, mi padre no me cuenta nada.

-Pero...ni siquiera sabes quién está provocando los ataques?- preguntó Ron a lo que el platinado finalmente lo miró.

-No, no lo sé y si lo supiera, no diría nada.- dijo tomando la carta.- Ahora por que tanto interés?

-Nada, es que... hemos escuchado que han petrificado a alumnos.- dijo Ron con nervios.
-Lo sé, espero que la próxima sea la estúpida de Granger come libros.- dijo con una sonrisa.

Ron se levantó con intención d e decirle algo peor Harry fue más rápido y lo paró.
-Estáis raros, y eso que ya lo sois.- dijo Draco levantándose una ceja.- Que os pasa?

-A quien le enviaras la carta?- preguntó Harry intentando cambiar de tema.

Draco los analizó de arriba a abajo para ignorarlos e irse de allí dejándolos solos.
-No es por meterme ni nada pero diría que se lo envía a Aria.- dijo Theo quien se encontraba junto icon Pansy.

-Aria?- preguntó Ron.- Quién es?
-No lo sabemos.- dijeron a la vez.

-Solo sabemos que siempre le envía cartas y a veces regalos, de todas formas vosotros ya lo deberías saber.- dijo la peli negra mirándolos raros.

-Si, solo que... está raro.- dijo Harry.
-Draco siempre ha sido raro, no es sorpresa.- dijo Theo restándole importancia.

Harry y Ron decidieron volver con Hermione para explicarle todo lo que habían descubierto sobre el platinado.

Cuando llegaron la castaña aún se encontraba dentro de uno de los lavabos pues en vez de tomar un pelo de una persona, tomó el pelo de una gata, convirtiéndose en una.

-Chicos? Habéis averiguado algo?- preguntó ella con esperanza de haber resuelto algo.

-La verdad es que no lo sabemos, es decir... Malfoy dice que no tiene idea de quién puede ser el heredero.- dijo Ron mientras se lavaba la cara.

-Si pero después estaban esas cartas raras.- añadió el azabache.
-Cartas raras?- preguntó Hermione.

-Si, y Aria.- finalizó por decir el pelirrojo.- Conocéis alguna Aria que vaya a Hogwarts?- preguntó Ron algo perdido.

-No se lo habéis preguntado?- preguntó la castaña a lo que ellos asintieron.
-Si, pero nadie sabe quién es, ni siquiera sus amigos.- dijo Harry mirando al suelo.

-Entonces tenemos algo claro.- sentenció Hermione a lo que ellos preguntaron "qué es?"- Que Draco oculta algo, algo importante.

-Bueno, eso era obvio.- dijo Ron cruzándose de brazos.- Chicos creo que no estamos yendo por el camino correcto, deberíamos dejar a Malfoy de lado por un tiempo....

-Pero...- empezó Harry a decir.
-Harry, Ron tiene razón, a lo mejor solo... son cosas suyas, familiares.- dijo la castaña estando de acuerdo con el pelirrojo.

Las navidades sin duda alguna estaban siendo para Draco demasiado aburridas y tristes sin la compañía de Aria.

Pero podíamos decir lo mismo de la chica quién es ese momento se encontraba en su cuarto, sola pues sus padres siempre tenían que asistir a reuniones importantes con la familia Malfoy y otras.

Sin embargo, los chicos seguían escribiéndose y deseándose una buena navidad.

Aria cerró los ojos y se estiró en su cama con la carta que acababa de recibir de Draco.
-No sabes como te extraño.- se dijo así misma cuando empezó a leerla.

Por qué tenía que ser tan injusto para los chicos cuando lo único que pedían era estar juntos?