- ... y vengo a declarar sobre el caso del burdel...Las palabras de la chica perforaron en los oídos de HoSeok como si de algún tipo de maldición se tratara, comenzaba a creer que ese caso duraría abierto más de lo que le gustaría admitir, pero tal vez un nuevo testigo podría ser de ayuda para resolverlo lo más pronto posible.
No lo pensó, como un rayo atravesó el vestíbulo hasta llegar a donde una chica se encontraba, nerviosa y transmitiendo un aura de inseguridad, pero aun así parecía convencida de lo que diría.
- Yo me hago cargo, John. - La muchacha le miró, completamente expectante- Mucho gusto, yo soy Jung HoSeok, uno de los oficiales encargados del caso del burdel de los Omega, escuché que tiene información, sígame por favor.
La chica siguió sus órdenes, caminando a través de un pasillo directo hacia la sala de conferencias, sentía el sudor caer por su frente, estaba asustada y sin embargo estaba completamente decidida a hacer aquella confesión que podría cambiar su vida para siempre.
- Por aquí, tome asiento.
La muchacha obedeció, sentándose en la mesa de interrogaciones ¿Cuantas veces había visto esa escena en películas? No estaba segura, era algo completamente habitual en las cintas de acción y sin embargo nunca pensó poderse encontrar en aquella situación.
El Alfa por otro lado parecía completamente adecuado a ese escenario, ni siquiera se inmutó en el momento en el que con total naturalidad extrajo una pequeña grabadora del interior del bolsillo de su pantalón y después la encendió tomando asiento junto a la chica.
- Dígame ¿Qué tipo de información tiene para mí?
La caja de Pandora había sido abierta, ahora ya no había vuelta atrás.
🗝
Después de su estancia fuera de casa, NamJoon estaba más que ansioso de volver a su hogar. Si bien su celo no había pasado completamente, sus efectos se habían reducido de manera considerable habiéndole pensar que se encontraba ya en perfectas condiciones para volver al departamento que compartía con el Omega. Ese pensamiento hacia que una enorme sonrisa se instalara en sus labios. Quería verlo, no sabía en qué momento esa emoción se había instalado en lo más profundo de su alma, añoraba tener ante él aquellos finos rasgos, aquella sonrisa adorable y rosadas mejillas que tanto apreciaba. Negar aquellos sentimientos era tonto a estas alturas y lo sabía, pero como todo ser humano NamJoon no era perfecto y esta vez sería un tonto por naturaleza.
Ni siquiera paso a su oficina, si no que condijo directamente hacia su apartamento, no podía esperar el momento de ver a SeokJin.
Los minutos se le hicieron eternos en el ascensor, tanto que cuando la puerta al fin se abrió suspiró aliviado y sonrió, sonrisa que se ensanchó aún más al ver la delgada figura del omega saliendo de la cocina. Era una imagen preciosa, sus mejillas tenían un poco de harina y en su nariz estaba seguro de poder ver una pequeña mancha de chocolate, sus manos cubiertas por un par de guantes de cocina que parecían demasiado grandes para él, pero en ese momento lo hacían ver en extremo adorable.
SeokJin era adorable.
El Omega se sorprendió demasiado al verle, no le esperaba en casa hasta por lo menos dos días después, rápidamente sus mejillas cambiaron de color ¿Por qué llegaba justo en aquel momento? Justo en el momento en el que su ropa era un desastre y su cuerpo parecía acabar de salir de una panadería, estaba avergonzado, pero NamJoon parecía no advertir esa vergüenza.
- Nam...
- ¡Jin! - El Alfa se abalanzó hacia el Omega dejando que su parte primitiva tomara un poco el control de su cuerpo, aprisionó al pequeño Omega entre sus brazos alzándolo ligeramente en el aire dándole un par de vueltas antes de depositarlo nuevamente en el suelo, pero aún sin dejarlo ir del todo. Dejo que su cabeza reposara sobre la coronilla del chico, respirando y dejando que su nariz se impregnara del delicioso aroma a duraznos que tanto le embriagaba y desafiaba su cordura. El Omega por otro lado estaba feliz, demasiado feliz por volver a tener al Alfa en casa, esos días lejos de él habían estado teñidos de angustia, sabía que estaba seguro y sin embargo él no tener a NamJoon cerca le hacía sentirse tremendamente vulnerable, pero ahora todo estaba bien, NamJoon estaba en casa y las cosas volverían a ser como antes, volvería a tener aquellas noches de tranquilidad y tardes de películas que tanto adoraba, al fin volvería a ser como antes. - Te extrañe Jin, demasiado ¿Has estado bien? ¿Pasó algo mientras no estaba?
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"Dreamy" || NamJin/Omegaverse
Fanfiction- Mgh~ ¡Basta! ¿Por qué el mundo era tan cruel?, nadie lo sabía y si lo hacía seguramente eran lo suficientemente egoístas para compartir la respuesta, o por lo menos eso era lo que pensaba SeokJin. La vida de un omega debería ser hermosa ¿No es ver...