Capítulo 37

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Separados pero unidos

Pov Bruno

Bueno mina, ahora que Pol está comprando te voy a contar mi odisea, como te explicamos en el capítulo anterior el 'estado de alarma' había finalizado, lo que hizo que mucha gente se volviera loca, por así decirlos, y empezar a irse de viaje, quedar con amigos y familia, cosa que también veo normal, después de ,as de un año sin verse.

De hecho Pol se fue con su padre y Gloria, a conocer en persona a la familia de ella, ya que solo se conocían de video llamadas y cosas de esas, pero bueno eso te lo contara luego Pol, como fue ese primer encuentro.

Pero no toda iba a ser felicidad, como te he dicho la gente salió loca a la calle y esas cosas, lo que para mí se resumió en un confinamiento, si acabábamos de salir de él y me tocaba estar otra vez, no por mí, sino porque un compañero de clases de danza, muy espabilado él, salió a con sus amigos el último fin de semana y con tan buena suerte que se acabo contagiando.

Así que ya ves, por culpa de un compañero, estamos todos los alumnos y la profesara sin poder salir de casa, por ser contacto estrecho, ya que vino a clase sin saber que era positivo.

Pero tranquila, que de momento no tenia ningún síntoma y como la yaya es una persona de riesgo, se fue a pasar estos días contigo.

Por mi parte tenía toda la casa para mi, otras veces hubiera dado lo que sea porque fuera así, pero justamente en ese momento, no.

Puesto que aunque tenía la casa para mi, decidí no salir de mi habitación para lo justo y necesario, ya que no quería dejar mis gérmenes por toda la casa, aunque limpiara dos veces al día las partes de la casa donde había estado o tocado.

Pero es que con esto nunca se sabia y lo que menos quería , era contagiar a la yaya o a Pol, ya que eran las personas que más tiempo pasaban esta casa conmigo y a pesar de que ahora no estaba ninguno de los dos, prefería prevenir que curar.

Por suerte como ya sabes, tenia baño propio dentro de la habitación y el ordenador al lado para no aburrirme, aunque siendo sincero, llego un momento en el que me aburría igual, a pesar de que me ponía música, hablaba con mis amigos por skype, practicaba los pasos d danza y por supuesto, hablaba con Pol siempre que podíamos.

Esto último, me hacia recordar cuando estuvimos confinaos los dos juntos en casa de Rai, cuando Pol se puso con fiebre y si, puede que Pol no estuviera en persona, pero siempre que podía me llamaba por videollamada o skype, para ver cómo estaba y nos podamos pegar una hora o mas hablando.

También me dijo, que en cuando pudiese vendría a cuidarme, cosa que a mí no me parecía bien, ya que depende cuando fuera , supondría que tendría que estar confinado conmigo y aunque una parte de mi tenía ganas de que eso volviera a pasar, sabía que no era justo para él,

Pero ya sabes cómo es Pol, igual o peor que papá cuando se le mete algo en la cabeza, asi que un día sin previo aviso, entro en la habitación mientras yo estaba viendo la tele y se tumbo a mi lado.

No te creas eh, que pegue un grito que por poco no me escuchaba toda Barcelona y es que a veces, se me olvida que Pol tiene llaves de mi casa y puede entrar cuando quiera.

Si, por mucho que le reprochara que hacía y me quejara de que hubiera venido, en el fondo me hizo feliz que estuviera a mí la lado, así que como no conseguí convencerlo para que se fuese, acabamos mi confinamiento los dos juntos.

A por cierto, nunca llegue a tener el Coronavirus y Pol tampoco, por suerte, solo quedo en otro susto.

Pov Pol

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