Coronavirus

Capítulo 13

De algo malo siempre sale algo bueno

Pov Calduch

Bueno Mina, me paso por aquí para contarte mi estancia en el hospital.

El caso es que uno de los chicos, con los que trabajaba, acabo dando positivo en coronavirus y aunque nos hicimos las pruebas y dimos negativo, a los días pensé que en consecuencias del tabaco, aunque llevaba meses sin fumar, pero bueno siempre lo había hecho.

Y bueno, no se lo digas a tu hermano, pero a veces, aprovechando que solo estoy con Pol, le pido un cigarro, ya que para mi suerte, él sigue fumando y no poco.

No pienses que miento a tu hermano, es sólo, que es mejor no preocuparle, que sino luego se pone insoportable, ya lo conoces.

Bueno como te iba diciendo, intente no darle mucha importancia, hasta que un día note que me faltaba el aire, tu hermano como a veces es un poco cortijito, pensó que le estaba tomando el pelo.

Madre mía, aún recuero la cara que puso, cuando se dio cuenta que no era ninguna broma, parecía que había visto un zombi o yo que, así que le tumbe que decir con las pocas fuerzas que tenia: "Niño, como sigas así, pensare que el que esta teniendo un ataque eres tu no yo".

Por suerte acabo reaccionando y llamo una ambulancia.

Sabes, lo malo de ser tan conocida y haber hecho tantos proyectos, es que hasta en el hospital, algún que otro me reconocía.

Aunque la mayoría que me reconocían no era por mis obras, sino por un anuncio de paté, eso me recordó a Pol, ya que el día que lo conocí me dijo exactamente lo mismo.

Hamlet, Shakespeare y muchos más y que te acabaran reconociendo por un anuncio de pate, es algo que jamás entenderé, sin duda la mayoría de la población por desgracia son bastante incultos.

Y si, ya ni morir tranquilo te dejaban, si eras alguien conocido, eso sí, si eras un don nadie, solo pasaban lo necesario para saber que seguías vivo.

Es algo que nunca entenderé de la sanidad pública, aunque claro, también te tengo que decir, que no todos los centros eran iguales, ni se organizaban de la misma forma, todo hay que decirlo.

La mayoría de los sanitarios de nuestro país, trabajaban muy duro y lo daban todo por los cuidados, pero sí que es verdad, que siempre había alguien que hacia lo contrario.

También te tengo que decir, que en el hospital donde estuve ingresado, recibe un trato muy bueno y si, fue el mismo hospital donde falleció tu padre y claro, el temor estaba ahí.

Estuve una semana ingresada más o menos y sin duda fue la semana más aburrida de mi vida, pero lo peor es que no podía recibir vistas por si acaso, por suerte me dejaban hacer una video llamada al día y siempre la usaba para llamar a Bruno, no es que a ti no te quisiera, tranquila que Gina me mandaba fotos tuya todos los días.

Pero claro, lo de Bruno era de otro nivel, además estaba mal por lo de Pol y con razón.

Qué suerte tenía el Rubio, de que me hubieran ingresado, porque sino iría a su casa a decirle cuatro verdades a la cara, aunque creo que Alfonso se encargo de ello, ya que el día que me dieron el alta, al salir con Bruno de ahí, nos lo encantamos en las escaleras con un ramo de flores.

Pero claro el cabreo que llevaba guardando desde que me enteré, se hizo presente, cogí el ramo de sus manos y se lo estampe en la cabeza, mientras que le dejaba las cosas clara, a mi manera y con una frase, que creo que le quedo bastante clara.

Al final cogí una flor y el resto se lo devolví, bueno lo que quedaba del ramo.

Sabía que los dos tenían que hablar a solas, así que decidí coger un taxi sola y así dejarles intimidad.