Mía

Capitulo Cuarenta Y Dos|Eres un peligro entre Humanos.

C A P I T U L O
C U A R E N T A Y D O S

Eres un peligro entre humanos.

Kler:

—Entonces, ¿Como llegaste aquí?—Le Pregunto a Agnes mientras me tomo un poco de caldo de sopa.

—Así como tú —Responde.

—¿También fuiste Secuestrada?—Ella asiente.

—¿Por que?

—Cosas de el pasado. —Susurra.

—¿Que edad tenias cuando fuiste secuestrada?—Quiero obtener la mayor información posible, Quiero saber con quien persona estoy tratando.

Gracias a Jeff aprendí eso.

Jeff, como te extraño.

—Tenía 12 Años, Estaba jugando Con mi hermano y Ellos me llevaron.

¿Ellos? ¿Quienes?

¿Los que me llevaron a mi también? Estás personas están muy bien organizadas, todos tienen apodos. Nadie me dice su nombre real.

Excepto Agnes. Y dudo que ese sea su nombre real.

Por una extraña causa, no desconfío de ella, pero necesito saber más de ella. Yo necesito salir de acá, solo ha pasado una semana y 3 días.

Esos son exactamente 10 Días.

Y para mi han sido como meses, aquel hombre viene casi todos los días a molestarme. Y a decirme que Jeff es tan incompetente que ni siquiera me ah podido encontrar.

Alguien avienta la puerta y es aquel hombre. Agnes inmediatamente posa su mirada al piso y empieza a tragar grueso.

—¿Que haces aquí Agnes? Vete ahora mismo a limpiar la Ala Oeste, Hubo un pequeño Accidente. —Ella se para y Se dirige a la puerta pero antes de salir le dice:

—Llévate el detergente que desmancha los pisos. Hubo mucha sangre.

Y Ella se va.

Y estaba a punto de rogarle que se quedara, pero el no lo iba a permitir.

—Sabes Pequeña Zorra, Jeff debe de envidiarme en estos momentos.

—¿Por que lo dices? —Susurró mientras cubro mi cuerpo con la sabana.

Aun tengo moretones, y una quemadura por el frío de el hierro que tengo en el pie. Algo me dice que esas marcas no se borraran, y tienen pinta que empeorarán.

—Por que en estos momentos te tengo enfrente de mi, Con una bata de seda blanca, Tu cabello alborotado y tus labios hinchados. Te ves tan pura. —El Se acerca a mi y mi cuerpo empieza a temblar.

Solo tenerlo a una distancia prolongada me da pánico. Y tenerlo tan cerca me da terror.

El se acerca a mi y yo lo miro, algo trama tiene una mirada traviesa que no me agrada.