𝖀𝖓𝖋𝖆𝖎𝖙𝖍𝖋𝖚𝖑

Cap 12

Christopher maldijo con los dientes apretados, las puertas del ascensor se abrieron y Chris mirando los pies descalzos de Dulce la tomo en brazos.

-¿Qué haces?

-¿Qué quieres que haga? No te pienso dejar en el suelo.

Entraron en el garaje y Chris fue hacia su coche, abrió la puerta con una mano y metió a Dulce dentro, rodeo el coche y se metió detrás del volante.

El camino fue silencioso ninguno de los dos hablaban, Dulce le miro sorprendida cuando paro el coche en una casa que no era la suya.

-¿Dónde estamos?

-En casa de Ana.

Dijo Chris indiferente.

-¿Por qué?

-¿Deseas que Alfonso te vea llegando descalza

Dulce gimió y enterró el rostro entre sus manos. Chris soltó su cinturón y la acaricio el pelo.
-Tranquila todo va a salir bien.

-No Chris, no esta bien, ¿Qué voy a decirle cuando pregunte que ha hecho su mujer toda una noche desaparecida?

Chris la miro con ojos culpables, salió de coche y volvió cinco minutos mas tarde, abrió la puerta de Dulce y la cedió unos zapatos negros de tacón.

Entro en el coche y le puso en marcha, cuando llevaban medio trayecto Dulce decidió romper el silencio

-Chris...

-¿Qué?

-¿Ana no te ha preguntado?

-No

Chris paro el coche unas calles antes de la casa de Dulce

-No puedo llevarte hasta allí.

-Lo entiendo.

Dulce salió del coche, ninguno de los dos se despidió, y Dulce aguantando las lagrimas llego andando hasta lo que era "su hogar".

Dulce iba a tocar la puerta cuando esta se abrió, de ella salió una mujer alta y sexy, colocándose un tacón y peinándose con los dedos su larga y rubia cabellera.
La joven tartamudeando la saludo y se esfumo.

¿Qué había sido eso?

Dulce entro lentamente en la casa.

-¿Caramelito se te olvido algo?

Alfonso tapado solo por un albornoz se dio la vuelta y se encontró con Dulce.

-¿Caramelito?

Dulce repudio esas palabras, la cara de Alfonso pasó de sorpresa a furia, se acerco a ella en dos zancadas y la tomo de los hombros zarandeándola.

-¿Qué te esperas Dulce? Desapareces una noche y encima quieres que te sea fiel, esa rubia... ¿como se llamaba?, bueno no importa, no pude negarme, pero tu no te creas mejor persona, que casualidad que mi hermano y tu desaparecisteis en el mismo momento y ya no volvisteis.

-Yo... no estuvimos juntos.

Los movimientos de Alfonso cada vez eran más rápidos y la estaba lastimando.

-No seas mentirosa Dulce. Pero te digo una cosa, como te vea con mi hermano, te mato. ¿lo entiendes?

La acaricio una mejilla y Duce sintió asco de ella misma.

-Bueno mas bien no, le mato a el. Eso te dolerá más ¿verdad?

Alfonso rio en carcajadas y la obligo a besarle.