•Veintiuno•

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Mis manos casi que sudaban de los nervios, todo estaba preparado en cambio yo no.

Nunca había tenido una cita formal y menos alguien me había gustado de la forma en la que Hermione lo hacía y eso aumentaba mis nervios.

Me encontraba en mitad de un un gran prado verde, pequeños toques de colores rojos, violetas y amarillos que venían de las flores asomaban de entre lo verde, uno de los grandes árboles hacia una sombra lo bastante grande para que debajo tuviese puesto una manta y una cesta llena de comida que yo misma había preparado.

Acomodé mi falda y carraspeé mi garganta cuando vi que Harry traía a Hermione en su escoba pero esta venía con los ojos vendados.

Antes de irme Harry me articuló con los labios "Suerte" y sonriente volvió a desaparecer en su escoba.

—Señorita Granger— dije acercándome a ella, tomándola de las manos.

—Menos mal –suspiró —Por un momento pensé que Harry me había dejado en el lugar incorrecto, con lo despistado que es—

Uy si, la persona perfecta para un momento romántico es ella.

—Ya, y tú no confías en mi— dije guiándola hacia la sombra del árbol.

—Claro que lo hago— su voz salió chillona mirando en una dirección en la que yo no estaba.

—Estoy detrás— ella no lo pudo ver pero sonreí ante su ternura.

¿Qué me has hecho Hermione Granger?

La ayudé a sentarse en la manta y a mitad del beso que le di tras ayudarla quité su venda, cuando abrió los ojos tras el beso pude ver el brillo en estos mientras observaba el lugar.

—Este lugar es...precioso— dijo viendo las mariposas revolotear.

Pensé algo bastante cursi en ese momento y hasta yo misma me asqueé.

—¿Empanadas?— dije sacando un táper de la cesta, su sonrisa fue una respuesta clara a que sí.

Las conversaciones entre ella y yo siempre eran muy fluidas, pero este momento en el que estaba dispuesta a dar mi 100% de amor absoluto hacia ella lo único que hacía era escucharla.

—Hermione –paró de hablar sobre aquel libro que tanto le gustó leer el verano pasado, quedando con una sonrisa congelada.

—Te he aburrido— suspiró.

—No, no es eso –negué con la cabeza— Solo quiero decírtelo ya— me mordí el labio inferior nerviosa.

Un tono carmesí fue claro en sus ojos.

—¿El qué?— dijo suave.

—Hermione tú sabes que yo nunca he estado de manera formal con nadie, tampoco se al cien porciento lo que es amar de verdad a alguien, pero cuando describen lo que es el amor... sé que todo eso me pasa contigo, odio lo cursi odio los cumplidos te lo juro son irritantes, pero contigo suenan distintos, son especiales, tú haces todo un poquito mejor y ahí está la diferencia del estar enamorado, del que te guste de verdad alguien y de una vez por todas quiero hacerlo oficial – respiré hondo, miré sus manos entrelazadas con las mías y después sus ojos— ¿Quieres...– Por Salazar Jannet —¿Quieres ser mi novia? —solté el aire de mis pulmones.

Fiuuu, eso había costado.

Ella estaba con la boca entreabierta, casi me asusto hasta  que vi que su sonrisa cada vez se ensanchaba más y más.

—Por supuesto que quiero – se lanzó a mis brazos, llenándome de besos la cara —Ya era hora Jannet— y el beso esta vez fue en los labios, nuestro primer beso como pareja oficial.

ꜱᴏʟᴏ ᴜɴᴀ ᴠᴇᴢ~ ʜᴇʀᴍɪᴏɴᴇ ɢʀᴀɴɢᴇʀ (+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora