La testaruda y orgullosa hija menor, de remus Lupín, lexie. Se enfrentará a su quinto año escolar, después la muerte de su novio y su problema con las drogas. Promete no volver a sentir amor hacia nadie más... Pero llegan dos personas que cambiarán...
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Les voy a dar un resumen de lo que ha sido mi vida estos últimos cuatro años.
Mi primer año fue de la mierda. Los niños eran terribles conmigo, sabían de mi licantropia y me trataban horrible. Lloré varias noches —nunca se lo conté a mis padres— pero teddy, draco, blaise y theo se encargaron de que no me volvieran a molestar —aun cuando paso por los pasillos murmuran cosas, pero he aprendido a ignorarlo.
Empecé una hermosa amistad con hermione, —ahora somos mejores amigas— también con ginny y Astoria.
Sigo siendo mejor amiga de dean y seamus.
Me volví amiga de blaise, draco y theodore —en primer año me la pasaba discutiendo con theo, pero a través de los años nos hicimos amigos.
Entre al equipo de quidditch en segundo año, sigo estando en él y soy muy buena en realidad.
También soy una de las mejores en mi clase, soy muy buena en DCLAO.
La relación con mis padres se arruino a través de los años —con mamá ya casi no hablo, a través de que iba creciendo me iba alejando de ella y ya no teníamos cosas en común— con... mi padre... él cometió un grave error, el cual fue causante de mi odio hacia el —no le dirijo la palabra a él ni a sirius.
En cuarto año me hice novia de cedric diggory... y él... —Aún no soy capaz de hablar del tema.
Estas vacaciones estuve... estuve en un centro de rehabilitación, tuve algunos problemas con las drogas, pero en un futuro les hablaré de eso.
Sobre el tema de mi licantropia, ha ido empeorando con los años... pero theo me ha ayudado mucho con eso, el día después de Luna llena el siempre me ayuda a curar mis heridas.
—¡Lexie!—Me gritó teddy, desde el umbral de la puerta.
—¿Si?—Pregunte, con el ceño fruncido.
—Te estaba hablando—Me dijo, cruzándose de brazos—Estabas muy distraída, ¿en que estabas pensando?
—En nada—Le dije—¿Para que me necesitas?
—Hoy te toca tomar los medicamentos—Me dijo, suspirando.
Puse los ojos en blanco —Pero si no me han dado ganas de consumir.
—Aún así toca que te la tomes hasta que estés completamente limpia—Me dijo, sobándose la nuca.
Asentí y el bajo a traerme un vaso con agua para pasar las pastillas.
Metadona. Buprenorfina. Naltrexona de liberación prolongada. Lofexidina.
Esas eran las pastas que me tocaban tomar. Son un maldito martirio, no me dan ánimos de nada y me dejan tirada en la cama por días.
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—¡Mierda!—Chillo Astoria.
Estábamos en una tienda muggle donde hacían tatuajes y piercings —teddy me la recomendó.
