🔪 El asesino... caníbal 🍖 || Luberto [Luca × Alberto] || LUCA

Cap. 29 [COMPAÑÍA🔎📔]

-Vamos... soy como mi padre en el agua, no se que te da miedo, y si ya me has visto cuando nos bañamos juntos... ven...- dijo Francesco.
-Es que... no se nadar y tu herida no se ha citado bien... debemos regresar...- contestó Cameron nervioso.
-Mi herida va a ser la misma en el agua como en la superficie, yo te enseñó a nadar, confía en mi, miedoso...- decía Francesco retando a su pareja.
-No soy miedoso... tu si...- Cameron no sabia que decir.
-Bien... vamos a tu casa, pongamos la tina y te pongo los flotadores aun si puedes pararte- decía irónicamente Francesco.
-Ok, pero no me sueltes de la mano- dicho eso, Cameron tomó de la mano a su pareja y entraron al mar desde la orilla de Portorosso.

Cameron aprendió a nadar a cierta profundidad, pues tenía miedo de nadar en una profundidad del triple de su altura;
-Mira, no nadaba porque casi no pasaban tiempo conmigo mis padres, mi mamá limpiaba la casa y mi padre casi no la dejaba salir, pero creo que ya ha de estar mejor- dijo algo triste Cameron mientras flotaba al lado de su novio.
-Descuida, el imbécil de tu padre ya no puede controlarte, tu mamá debe ser fuerte y comprender que no es de nadie aún si es mujer, pero que tampoco se pase y quiera quitarle todo a tu padre- contestó Francesco consolando a su pareja.
-Tu si que sabes como me siento, te amo- contestó con lágrimas de felicidad Cameron y abrazando a su novio.
-Yo también te amo- dijo Francesco correspondiendo el abrazo y dándole un beso tierno a Cameron -volvamos a casa- terminó Francesco.

Luca, Alberto y Luigi estaban cada vez más estresados por el trabajo, las entregas casi se retardaban, los pedidos de asesinatos estaban aumentando demasiado, ya no podían, debían contratar a más gente, pero no sabían cómo sin que una de esas personas fuera un impostor queriendo robar información de la mafia italiana, así que solo les quedaba una opción arriesgada, Cameron.

Cameron y Francesco pasaron a saludar a los padres de Francesco, Carlo seguía con las entregas, pero como ahora pudo pagar una Vespa, compró una y las entregas se le dificultaban menos;

-Cameron, eres nuestra única opción, necesitamos tu ayuda para que el trabajo se nos reduzca, ayúdanos a contratar gente para nuestra mafia, porfa...- decía Luca algo estresado mirando a su yerno.
-Descuide, ya hasta se quien quisiera ayudarles, solo deme este día y mañana llegan- contestó confiado y Luca le agradeció demasiado la ayuda.

Cameron y Francesco fueron a la casa del mayor, ahí podrían platicar mejor con las personas del asunto;
-Hola, Samuel, soy yo, Cameron, te tengo una oportunidad de trabajo, ya sabes de que... si, de eso... ok, te espero en la estación del tren de Portorosso mañana... adiós...- colgó Cameron el teléfono de la casa.
-¿De dónde es el?- pregunto algo intrigado Francesco.
-De Colombia, tengo mis contactos gracias a que mi padre... siempre viajaba y a veces me llevaba, conozco gente de todo el mundo, si quieres, puedes descansar, yo hago las llamadas- contestó Cameron.
-Bien, te espero en la cama amor- decía Francesco mientras le daba un beso tierno a su pareja en los labios.
-Hola Verónica, ¿cómo estás?...-
-Camille, amiga mía...-
-¿Qué tal Ryo amigo?, ¿todavía te gustan las entregas peligrosas?...-
-Kahiko, ¿quisieras que nos vieras en Portorosso para hablar de asuntos "profesionales"?...-

Ya era de madrugada, Luca Y Luigi se quedaron despiertos hasta tarde para terminar el trabajo, y quedaba más por hacer, Carlo durmió un poco, ya que estuvo entregando hasta las ocho de la noche, Alberto, no podía dormir sin su esposo a su lado, Francesco y Cameron se levantaron temprano y se bañaron juntos para salir a recibir a sus amigos, el arduo trabajo de Luca, Luigi y Alberto en la mafia disminuiría demasiado  pues necesitaban urgentemente la ayuda de más personas, no podía seguir de esa forma por mucho tiempo o morirían del cansancio.

-Mira, ya llegó el tren, por cierto, ¿cómo son esos amigos tuyos amor?- preguntó Francesco con Cameron a su lado viendo llegar el tren, pues todos decidieron verse en un lugar y llegar a Portorosso juntos.
-Kahiko es de las islas de Hawaii, es un poco más alto que yo, Verónica es de México y es la más pequeña, creo que de tu tamaño amor, Samuel es del valle del Cocora, somos casi iguales, aunque claro, yo soy mas guapo que el...- dijo con una sonrisa pícara y Francesco rió un poco -...Ryo es de Japón, es bastante inteligente, creo que es obvio porque sus padres lo obligaban a aprender muchas cosas a la vez, hasta podría decir que entre el y yo, el tiene un poco más de ventaja, pero solo un poco, y Camile es de París, la ciudad del amor, pero que no te confunda, es bastante astuta, aunque planea cosas bastante complicadas incluso para ella, y es algo delgada, le gusta aparentar ser alguien más cuando se trata de una lucha- finalizó Cameron esperando a que todos bajaran del tren.
-Wow, se ve que sabes a quien dejar entrar en tu círculo social- respondió Francesco algo sorprendido por la explicación tan detallada de los amigos de su novio.
-Obvio, tu estas ahí... pero como mi pareja...- contestó Cameron, dándole un beso apasionante a su pareja en los labios y siendo correspondido por Francesco;

-Guarden el amor para después, lo veo todo el tiempo...- se escuchó cercas la voz de una mujer.
-Camille, bienvenida, el es Francesco, mi novio...- respondió Cameron feliz de ver a su amiga.
-¿Será que me recuerdas también a mi Cameron?- decía un chico.
-Pero claro Ryo, como olvidar al chico que apenas y disfrutaba una fiesta- contestó abrazando a su amigo, lo que puso algo celoso a Francesco.
-Tranquilo chico... ¿cómo te llamas?- preguntó Ryo extendiendo su mano a Francesco.
-Francesco Di Gati, novio de Cameron- correspondió el apretón de manos de Ryo.
-Hola amigo... se ve que ya eres mandilón- dijo una chica a lo lejos en un tono de burla a Cameron, aunque eso molesto por dentro a Francesco.
-Cállate pendeja, si bien que tu tambien lo eres...- contestó aún en tono de burla Cameron con un abrazo a su amiga, y eso ponía más celoso a Francesco, era claro, sacó las actitudes de su padre, Giancarlo.
-De mi no te olvides Cameron- decía otro chico.
-Samuel... como olvidarte amigo, me encanto pasar momentos muy buenos contigo en el valle del Cocora...- respondió dándole un apretón de manos con abrazo a su amigo -...bien, los llame porque el padre de mi novio esta teniendo problemas con su negocio, ya saben de que, y necesita su ayuda para que su trabajo sea menos, ya que estuvieron entre el, su esposo y un compañero de trabajo que sobrevivió dirigiendo durante más de cinco años sin ayuda todo, así que vamos, que el trabajo empieza ya- dijo Cameron indicando que todo lo siguieran al lugar en donde hablarían de los asuntos de trabajo.

🔎-📔-🔎-📔-🔎-📔-🔎-📔-🔎-📔