– Te amo.
Dongheon deja de mover las caderas y se acuesta de espalda sobre la cama. Minchan pasa suavemente sus labios sobre el cuello del mayor y ambas respiraciones vuelven a acelerar.
Dongheon quiere responder, pero siente que algo le impide. Evita la mirada de Minchan y voltea disimuladamente hacia la puerta semicerrada.
Sus cansados párpados apenas pueden dejarlo reconocer la cabellera rubia asomándose en la abertura.
– Channie...
– Honey...
Dongheon sonríe y junta sus labios con el castaño.
Hoyoung se aleja, sintiendo que ya no puede verlos por más tiempo tocándose y pegando cada vez más sus cuerpos.
Va a su habitación, para asegurarse que Kangmin siga durmiendo y no se haya quitados los auriculares que reproducen música tradicional; con tal de que no despierte por oír sonidos desconocidos a su edad.
– Como un angelito – cubre hasta la cabeza con el cobertor y sale nuevamente, para despejar su mente en el living.
Justamente, ingresa Yeonho notablemente furioso, Yongseung lo sigue corriendo, deteniendolo del brazo y poco después ingresa Gyehyeon decaído.
– Yeonho.
– ¡Suéltame!
– ¡No!
– No, Yeonho – Gyehyeon se acerca y Hoyoung se levanta del sofá.
Yeonho toma el brazo de Yongseung que sujeta el suyo y trata de quitarlo. Por su fuerte expresión, es notable que ambos luchan contra el otro.
– ¿Qué les sucede? Deténganse.
Yongseung obedece y suaviza su agarre, pero Yeonho continúa sujetándolo con fuerza y de igual forma lo empuja contra el suelo.
– ¡YongSeung! – GyeHyeon va a socorrerlo.
– ¡¿Qué te pasa, YeonHo?!
Yongseung aparta a los mayores y vuelve a enfrentar a Yeonho.
– ¡¿Qué te hice?! ¡¿Por qué me tratas de esta forma?!
– ¡Te advertí que te alejes!
– ¡Pero yo te amo, no puedo hacerlo!
– ¡Tú me alejaste de Gyehyeon!
– ¡Lo hice y lo siento! – Yongseung toma una mano de Yeonho y lo apoya sobre su pecho – Pero no me trates de esta forma, me lastima.
– No me importa – Yeonho intenta quitar su mano, pero Yongseung fuerza el agarre – No quiero saber nada de tí, ni tus sentimientos, porque destruíste los míos con Gyehyeon.
– ¿Gyehyeon te volverá a amar, si destruyes los míos? Tú lo lastimaste y lo alejarás más, al ver cómo me lastimas.
– No lo uses.
– Yo quería amarte. Tenía la esperanza que puedas corresponderme, si Gyehyeon diera la oportunidad, pero me hiciste llorar más de una vez con tus horribles rechazos y Gyehyeon-hyung ya no quiere que lastimes a nadie más. Pero le dije que te amo y intentaré más veces, para que puedas verme como yo quiero...

ESTÁS LEYENDO
LOCA OBSESIÓN
FanfictionUna historia donde el amor y la atracción a menudo se enredan con la confusión, la traición y el misterio.