LOCA OBSESIÓN

3

Yongseung

Los últimos días estuve llorando por las noches, recordando a cada momento las palabras de Yeonho y partiendo cada vez más mi corazón. Si supiera esto Kangmin, sentiría admiración por mí, pero Gyehyeon estaría ocupando el primer lugar como el hombre fuerte que admira, porque él también actúa como si nada pasara, después de lo que le sucedió.

Minchan pensó que yo seguía siendo amigo cercano de Yeonho y una vez me dijo, como no lo encontraba, que debe disculparse con Gyehyeon por ser tan malo.

– ¿A qué te refieres? – pregunto sin entender.

– Ahh. La violencia no está bien, sé que Yeonho no lo golpeó por accidente, esa marca era muy notable.

– Pero yo...

– Si vuelve a lastimarlo una vez más. Entenderé que estás de acuerdo con esa actitud y no tendré más opción que alejar a Gyehyeon de Yeonho. Es demasiado bueno para estar con tu amigo.

No tuve tiempo de hablar de eso con Yeonho, porque me evitaba y el trabajo nos distanciaba más.

No podía llorar frente a las cámaras o en público, no me gustaba mostrarme vulberable, pero parecía que todos notaban mi malestar y se enfocaban en mí, excepto Yeonho, de quien quería su total atención, la cual ahora era exclusiva para Gyehyeon, quien parecía evitarlo y entiendo su molestia.

– ¿Qué pasa, Yongseung? – todos dejan de bailar, cuando Dongheon me habla, para mirarme curiosos – Sueles estar muy concentrado en la coreografía, pero es la tercera vez que te veo hacer errores ¿Quieres que nos quedemos hasta tarde?

– Lo siento.

– De nuevo, todos – Dongheon regresa a su posición.

Continuamos bailando, pero de nuevo Yeonho invade mis pensamientos que, me hacen crear ideas para tenerlo conmigo. Mientras pensaba y le miraba de reojo, tropezé con un pié y caí al suelo, por suerte mis manos evitaron que mi rostro salga lastimado.

– ¡YongSeung, ponte de pié y hagámoslo de nuevo! – Dongheon va a apagar el reproductor de música haciendo notar su molestia.

– Sí – traté de apoyar mis muñecas, pero sentí mucho dolor y esta vez golpeé mi quijada con el suelo – ¡Ahh!

Todos se acercan.

– No puede ser – reniega el líder.

– ¿Está bien? – me pregunta Kangmin.

– Claro que no lo está – dice Dongheon poniéndose su deportivo – Ayúdenlo a levantarse, yo voy por ayuda.

– Te acompaño – le dice Hoyoung y también empieza a vestirse.

– Voy solo.

– No estás de buen humor, así sólo los harás enojar.

– Que voy solo – Dongheon sale rápidamente de la sala de ensayos y Hoyoung le sigue corriendo.

Kangmin y Yeonho, me ayudan a sentar.

– Trataré de conseguir un poco de hielo, ¿Me acompañas, Minchan? – dice Gyehyeon terminando de vestirse.

– Claro – responde ajustando su chaqueta en la cintura y abandonan la sala.

Mi hermanito mira a la puerta, manteniendo una expresión seria, pero en sus ojos, puedo ver una chispa de miedo. Así que, con dificultad, poso mi mano sobre la suya y sonrío.