El sol comienza a salir, proyectando su suave resplandor a través de las cortinas, mientras Hoyoung guía a Gyehyeon a través de la casa poco iluminada.
– Vamos a desayunar – dice Hoyoung suavemente – Parece que te vendría bien algo caliente.
Gyehyeon asiente en silencio, secándose los últimos rastros de lágrimas de sus mejillas.
Entran a la cocina y Hoyoung guía suavemente a Gyehyeon para que se siente en la isla de la cocina antes de comenzar a reunir los ingredientes para preparar un desayuno sencillo.
La atmósfera es tranquila y ligeramente tensa debido a lo sucedido anteriormente.
Hoyoung echa un rápido vistazo a Gyehyeon, mientras prepara el desayuno, y observa al más joven mirando al vacío.
– Te despertaste temprano – dice Hoyoung en voz baja, rompiendo un huevo en un tazón – ¿Pasó algo? ¿Quieres hablar sobre ello?
Gyehyeon se tensa y evita la mirada de Hoyoung.
– No, solo... No pude dormir.
Hoyoung suspira suavemente mientras voltea para mirar mejor a Gyehyeon.
– Has estado durmiendo con Yeonho por una semana. Sólo anoche decidiste dormir en tu habitación, pero ahora, esta mañana te encuentro llorando... – pregunta con notable inquietud en su mirada – ¿Pasó algo con Yeonho? ¿Pasó algo entre ustedes dos? ¿Pelearon?
Gyehyeon sacude la cabeza rápidamente y mira hacia la mesa.
– No, no es eso... Es solo que... Tuve una pesadilla, eso es todo.
Hoyoung mira detenidamente a Gyehyeon, buscando algún gesto que delate lo que realmente está pasando en la cabeza de Gyehyeon, pero Gyehyeon parece estar perdido en sus propios pensamientos, así que Hoyoung vuelve a preparar la mezcla para waffles.
– Una pesadilla, ¿Eh? – Hoyoung revuelve los huevos, pensando en sus propios pensamientos perturbadores – Está bien si no quieres hablar de eso. Pero sabes que estoy aquí, ¿Verdad?
Gyehyeon asiente y el silencio entre ellos se mantiene, pero no es incómodo, es un silencio cómodo y tranquilo, donde Hoyoung hace uso de sus habilidades en la cocina, mientras Gyehyeon le observa aún perdido en sus pensamientos, viéndolo ir y venir dentro la cocina, organizando las comidas en los platos y regresando a la estufa.
Gyehyeon ve a Hoyoung batiendo los huevos, y decide hablar después del prolongado silencio de palabras.
– Gracias – Gyehyeon apenas susurra, pero Hoyoung puede escucharlo a través del suave ruido que hace al preparar el desayuno.
Hoyoung mira por encima de su hombro mientras revuelve la mezcla en el tazón y sonríe suavemente. No necesita preguntar por qué Gyehyeon le agradece, sabe que lo hace por darle consuelo hace unos minutos en la terraza.
– No hay problema – Hoyoung responde todavía con un suave tono de voz mientras prepara la waflera – No tienes que llevar todo tú solo. Lo sabes. Hablar de ello ayuda.
Gyehyeon asiente, sintiéndose un poco tranquilo mientras observa a Hoyoung poner a cocinar los primeros waffles.
El suave chisporroteo de los waffles cocinándose llena el silencio de la cocina.

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LOCA OBSESIÓN
FanficUna historia donde el amor y la atracción a menudo se enredan con la confusión, la traición y el misterio.