Cuando llegó el último día del año, Gyehyeon y Yeonho quisieron aprovechar en salir para tener su tiempo a solas, dejando las preocupaciones y problemas en casa.
Tuvieron un almuerzo delicioso, dieron un corto paseo y visitaron un centro de atracción cercano.
Todo parecía tan bien, hasta que Kangmin los llamó desde el teléfono de Dongheon.
– Queremos ir con ustedes o regresen con algo para nosotros. Dongheon-hyung y Hoyoung-hyung nos dejaron aquí solos desde que ustedes se fueron... tal vez para vigilar, ¡Pero nos dejaron solos!
Regresaron, no sin antes comprar algún aperitivo para los menores, y esperar a la llegada de los mayores.
– ¿No dijeron a dónde iban?
Yongseung niega a la pregunta de Yeonho.
– Dongheon-hyung salió solo primero. Yo estaba con Hoyoung-hyung en su habitación y salí a buscarlo, cuando pensé que tardaba mucho en volver, pero Kangmin me dijo que había salido hace mucho.
– No me dijo a dónde iba.
– A mí tampoco. Salió de la habitación sin decir algo.
Gyehyeon mira preocupado a Yeonho.
– Tan pronto como lo dejamos solo se va.
– No debimos confiar tanto.
Yongseung y Kangmin les miran confundidos.
– ¿De qué hablan?
Gyehyeon voltea y sonríe bajando de la cama en la que sus menores comen los dulces.
– No es nada – se quita el abrigo y mira a Yeonho – Querías subir a las cabinas de la ruleta rusa, ¿Por qué no llevas contigo a Yongseung y Kangmin al centro? Que se diviertan un poco.
– ¿Yo? ¿Tú...
– Estoy muy cansado – finge bostezar – Ya no tengo energías para salir de nuevo, pero tú sí – guiña un ojo que los menores interpretan como coqueteo e ignoran la reacción de Yeonho.
– ¡Oh! De acuerdo. Necesitas descansar, sin estos ruidosos alrededor.
– ¿Qué?
– No somos ruidosos.
– Son otros.
Gyehyeon mira avergonzado a Yongseung y los apresura en alistarse, para echarlos de la habitación y que Yeonho los saque de casa, para salir sin hacerlos sospechar.
Kangmin camina felízmente entre Yeonho y Yongseung, mirando con sus brillantes ojos todas las atracciones y comidas que pueda tener.
– Quiero una manzana bañada en caramelo.
– Debes terminar ese helado y lo pensaré.
– Pero no puedo quitarme la mascarilla y las salas están llenas.
– Entonces, espera.
– Pero se va ha derretir.
– Debiste pensar en eso antes de pedirme comprarlo.
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LOCA OBSESIÓN
FanfictionUna historia donde el amor y la atracción a menudo se enredan con la confusión, la traición y el misterio.