SÁLVAME (LALITER)

4. Bruno

Entran a la residencia sin aire, Peter siente que no va a ser capaz de respirar bien hasta que vea a la persona sana y salva. En cuanto entran Nico habla con uno de los de seguridad que le llevan hasta la zona, al parecer tienen a todos los pacientes encerrados en sus habitaciones, Peter no puede parar de pensar en su hermana.

Los llevan hasta el jardín y cuando miran arriba lo ven, es un chico de unos 20 años, moreno, ojos azules, no para de llorar y si da un paso al frente caerá al vacío.

- ¡Deja de traer a gente! – Dice, Peter piensa que le está hablando al de seguridad, se queda de piedra, es como si su cerebro no supiera como reaccionar.

-Bruno, Bruno, mírame, soy yo, Nico. – Nico empieza a hablar, tiene la voz temblorosa. – Mírame, respira y tranquilízate por favor.

-Nicolás por favor vete, no quiero que lo veas. – Le contesta Bruno, se nota que no quiere hacer sufrir a nadie, pero sin quererlo lo hace.

-Pues no haga que lo vea, vete para atrás y hablemos, va a estar todo bien.

-NO, nunca está bien, esto. - Se toca la cabeza sin parar. - Esto nunca va bien, hay veces que parece que sí, pero siempre vuelve.

-Se va a solucionar, Bru...- Intenta decir Nico pero el chico de ojos azules le vuelve a gritar y se recoloca para tirarse, el de seguridad y el amigo de Nico gritan y le piden que no lo haga. Pero Peter está ahí, mirándolo, sin decir y hacer nada, como si todo su cuerpo se hubiese paralizado, hasta que es capaz de hablar.

- ¿Cómo te llamas? – Los tres miran a Peter, ¿es el momento? Aun así, el chico desde arriba le contesta.

-Me... me llamo Bruno, ¿quién eres? – Le pregunta, está muy confundido, cree que no lo ha visto nunca en su vida.

-Hola Bruno, encantado. Me llamo Juan Pedro, pero prefiero que me llamen Peter. – Nico no entiende la actitud de su amigo, ¿Cómo puede tener una conversación tan trivial con una persona que está amenazando con matarse? - Perdón por hacerte tantas preguntas pero, ¿cuántos años tienes?

-Tengo 20. – Sorprendentemente esta conversación hace que Bruno se tranquilice, y es ahí cuando Nico entiende lo que está haciendo su amigo, sin duda, es el mejor.

- ¿Y con esa edad te quieres tirar? Tienes un montón de cosas para hacer – Un poco directo, ¿no?

- ¿Un montón? Todo lo que he vivido hasta ahora es malo. – Desde la distancia ven que empieza a llorar otra vez, el de seguridad está cada vez más cerca de darle una patada en el culo al chico de los ojos verdes, piensa que le está incentivando a que haga algo que no debería.

-No creo que no hayas vivido ni siquiera una cosa buena. – Le dice Peter sonriendo, de verdad cree que le puede ayudar.

-No – Dice muy seguro el chico

-Piensa bien. Estoy convencido de que algo te hace feliz, aunque sea el detalle más pequeño. A mi me hace feliz el olor a lluvia después de una noche de tormenta. Piensa. – Hay un momento de silencio, Bruno está pensando, mucho, Peter sabe que no se quiere tirar, porque está intentando con todas sus fuerzas encontrar eso que hace que se aferre a la vida.

-Tocar la guitarra

- ¡Bien! Me encantaría escucharte tocar, me encanta la música, pero si ahora te tiras nunca más podrás hacer eso.

- ¡Me da igual! – Cuando parecía que había dado unos pasos hacia atrás se vuelve a colocar justo en el bordillo del edificio. Ahora son los tres los que vuelven a gritar que no lo haga.

Bruno está mirando a Peter, es como si algo le dijera que tiene razón, que debería seguir luchando, aún hay gente buena.

-Bruno.