Se encontraban ambos almorzando, alguna cosa que aprendió Noriaki durante su estancia en Reino Unido, que, aunque no le quedaba tan bien como la comida japonesa hacia el intento.
─Voy a salir pronto ¿Podrías quedarte con Sayuri? ─
─Claro ¿Qué harás? ─
─Iré a empezar el papeleo para recuperar mi identidad, no quiero seguir apareciendo como muerto en los registros, además como estamos en la capital creo que el proceso es mas fácil─ dijo lo ultimo con duda
─Está bien, tomate el tiempo que necesites─ sonrió
─Gracias, realmente es reconfortante saber que cuento con alguien─ también sonrió
─Extrañare demasiado esto cuando nos separemos─ pensó en voz alta, cuando lo noto desvió la mirada rápidamente.
Lo miro sorprendido, pero no dijo nada, ni siquiera él había aclarado que haría con todo eso...
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─De acuerdo, nos hemos quedado solo tu y yo, princesa─ sonrió mirando a esta ─Veamos que podemos hacer─ reviso la casa, pero no encontró muchos juegos para niños, bueno obviamente no iba a ver ninguno, entonces pensó en salir a comprar cosas, pero recordó que no era su ciudad, mucho menos su país ¿Cómo podría saber donde vendían juguetes de niños? Encendió la radio en una emisora, no entendía la música, pero prefería eso a no oír nada más que silencio, limpio la casa mientras llevaba a la bebe en canguro, cuando acabo finalmente tomo la decisión de salir de compras, aunque se perdiera era necesario.
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─ただいま (Llegue a casa)─ dijo como de costumbre solía hacerlo ahí, porque en Reino Unido eso había quedado olvidado, se quitó los zapatos y se sorprendió de ver varias bolsas en la sala y la casa muy ordenada, las luces estaban pagadas ─¿Dio?─ busco por la primera planta y no encontró nada, subió al segundo y ahí en la habitación de sus padres estaba el rubio con la pequeña pelirroja dormidos, era una escena... mas allá de tierna, realmente ese par encajaba mucho, sonrió de pensar que algún día cuando Sayuri creciera solo querría estar con él, eso era seguro. Los cubrió con una manta y luego fue a preparar algo de comer.
Cuanto termino subió nuevamente y llevo a la bebe a su habitación, aun no se explicaba porque le había dado la habitación de sus padres a Dio pero bueno. Luego volvió para despertar al rubio, sin querer se recostó y lo miro unos instantes, aún estaba confundido ¿Realmente debía quedarse con él? Esos días habían sido diferentes, para ambos, no había empleados ni horarios, nada, claro que eso no podía durar por siempre, aunque tampoco la pasaba mal en la casa del pueblo o en la hacienda, el ultimo par de años habían sido diferentes a como empezaron o a como la pasaron luego de “casarse”, era distinto, incluso más con el hecho de ser padres ¿Cómo alguien tan hermoso podía hacer tanto daño? ¿o quizá él era el exagerado que no podía superar la situación? ─Dio, la cena esta lista─ lo removió un poco
─ ¿Hmmm? ─ abrió un poco sus ojos, inmediatamente distinguió al pelirrojo, pensó se trataba de un sueño por lo que no dudo en acercarse y abrazarlo ─Si este es un sueño, no quiero que me despierten─ hablo, puesto que desde aquel día que hablaron no volvieron a dormir juntos ni a tener algún contacto como “pareja”
Instintivamente lo abrazo en su regazo acariciándole el cabello ─No es un sueño─ rio levemente
─Debe de serlo, tu no estarías aquí, conmigo─
Noto el tono triste del contrario, en parte era cierto, ni el entendía sus acciones, contradecían sus pensamientos, por lo que no dijo nada. El silencio duro unos minutos y cuando volvió a verle se había quedado dormido de nuevo ─Dio, ya está la comida─ lo volviendo a remover
─ ¿Enserio? ─ susurro con pereza
─Si, ven a comer, te espero─ lo soltó y se fue
En la cena no hablaron de la gran cosa, aunque no se notase ambos estaban agotados
─Por cierto ¿y esas bolsas que están en la sala? ─
─Oh si, salí con Sayuri a hacer algunas compras, de paso compré ropa para ti─ dijo un tanto distraído
─ ¿Qué? ¿Cómo lograste salir a comprar? ¿Cuánto gastaste? ─ sonó entre enojado y preocupado
─Bueno yo también me asuste, pensé que me perdería, pero había muchas personas amables y por eso llegue sin problemas, por el dinero no te preocupes, Sayuri también es mi hija─ sonrió ─Iré a lavar los platos─ recogió los mismos
─Preparare el biberón de la niña─ dijo yendo tras él
Luego de que despertara la niña y darle de comer estuvieron jugando con ella, siempre se veía con tanta energía, cuando menos se dio cuenta se quedó dormido.
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Pensé estaba subiendo capítulos reescritos pero no xD estos ya eran capítulos nuevos, espero les este gustando, ahora subiré un cap cada semana o dos por semana, quiero terminar breve esta historia para subir otras diokak que estoy escribiendo nwnSaludos~
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¿Esto Realmente Es Amor? •|Diokak|•
FanfictionEsta historia se situa a finales de la Segunda Guerra Mundial, Noriaki Kakyoin solia ser un artista en crecimiento, le encantaba pintar bellos cuadros y por primera vez fue invitado en el extranjero, Reino Unido fue su destino lo que no sabía era qu...