CAPÍTULO 36

420 55 0
                                    

"Una jodida confusión"

*Narrador omnisciente*
Mau salió de su departamento y se dirigió a la farmacia a comprar más antirretrovirales para su tratamiento, los guardó en los bolsillos de su pantalón y luego se dirigió al bar de Franco.
–Hola -saludó Franco cuando vio a entrar a Mau-
–Hola -dijo Mau sentándose en la barra-
–¿Vienes a buscar a Aidan? Hoy es su día libre -explicó Franco-
–No -dijo Mau sin más-
–¿Entonces? -inquirió el joven detrás de la barra-
–Tú dime, eres el dueño del bar y además un bartender -dijo Mau y Franco suspiró-
–¿Qué te sirvo?
–Lo mejor que tengas -pidió el ojinegro- Gracias -dijo después de que Franco le sirviera un trago-
–Según mis clientes... -dijo Franco iniciando una nueva conversación- Se va a un bar a desahogar las penas; ¿quieres contarme qué te sucede?
–Para ti qué es peor, ¿un amor no correspondido o un amor imposible? -Mau no dudó en preguntar-
–¿No son sinónimos?
–Digamos que ambas personas se quieren, pero no pueden estar juntos -explicó-
–¿Qué se los impide?
–Hay una amistad de por medio
–¿Entre la chica y tú? ¿O entre el novio de la chica y tú?
–Ambos -admitió Mau con la mirada gacha- ¿Qué harías tú en mi lugar? -preguntó volviendo sus ojos a los de Franco-
–Lo mismo que tú -dijo sirviéndole otro trago- ¿Y? ¿Ya se lo dijiste a T/N? -preguntó después de servir el trago-
Mau lo vio confundido y sorprendido a la vez.
–¿Y Aidan? -volvió a preguntar Franco-
–¿Qué? -dijo Mau por fin-
–De ellos son de quienes hablas, ¿no? Te refieres a tu amor por T/N y a tu amistad con ella y Aidan
–¿Tú cómo lo sabes?
–Lo supuse, tú me lo acabas de confirmar
–No se lo digas a Aidan -se apresuró a decir Mau-
–¿Entonces T/N ya lo sabe?
–Sí -confesó-
–¿Y ella qué dice? Se supone que también le gustas, ¿no? O al menos eso es lo que me diste a entender hace un momento
–Se supone. Yo creo que sólo está confundida
Franco suspiró.
–No lo sé. ¿Por eso terminó con Aidan?
–Terminó con él porque supuestamente ya no lo ama
–¿Y ahora te ama a ti?
–No estoy seguro
–¿De verdad crees que está confundida? -preguntó y Mau asintió con la cabeza-
–Creo que T/N sigue amando a Aidan, y sí, sólo está confundida. Ella cree que yo le gusto y que dejó de amar a Aidan, pero sólo lo cree, no está segura, porque aunque yo lo desearía, no es así, sólo es una jodida con confusión
Después de escuchar eso, Franco sólo esbozó una sonrisa atenuada y siguió sirviendo tragos a Mau y así hasta que el ojinegro se embriagó. Horas después, Roberta llegó al bar.
–Hola -saludó ella sentándose a un lao de Mau-
–¡Roby! ¡Que bueno que estás aquí! -dijo el ebrio de Mau sonriendo-
–¿Ah, sí? -preguntó ella con confusión-
–¿Quieres un trago? -preguntó Franco a Roberta-
–Por eso vine -respondió-
–Necesito tu opinión, ¿para ti qué es más doloroso, un amor no correspondido o un amor imposible? -volvió a cuestionar Mau-
–Un amor no correspondido -respondió viendo a Franco-
–¿Por qué? -quiso saber Franco-
–Porque si a ti te gusta alguien, pero tú no a esa persona, jamás vas a tener posibilidades de estar con ella, en cambio si es un amor imposible al menos sabes que tú también le gustas a esa persona, pero que por circunstancias de la vida no pueden estar juntos, y así te resignas porque es algo que no está en tus manos, y eso duele menos -explicó a los chicos-
–¡Resignarse, claro! -gritó Mau- ¡Que bueno que estás aquí, Roby! -dijo y la abrazó con efusividad-
–Ok -dijo Roberta confundida y con cierta mientras daba palmaditas al brazo de Mau que rodeaba su cuello-
Horas después, Mau estaba tan ebrio que reía cada que decía algo.
–Ok, tengo que irme -dijo Mau riendo-
–Yo te llevo a casa -ofreció Franco-
–Uh, déjame pagarte
–No es necesario -dijo pero Mau lo ignoró-
–Espera, yo tenía dinero por aquí -dijo entre risas-
Mau buscaba dinero dentro de sus bolsillos.
–Está bien -dijo Franco-
–Espera, espera, espera -volvió a decir Mau entre risas-
Mau puso lo que creyó que era dinero sobre la barra.
–Oh no, es un chicle, te lo regalo -rio-
Mau iba poniendo lo que sacaba de sus bolsillos sobre la barra.
–No, esas son mis llaves. Otro chicle, te lo regalo también. Esto no -dijo poniendo la nota de la farmacia sobre la barra, él no se percató qué era aquello y dejó que Roberta la tomara sin objeción- A ver, esto... -dijo poniendo sus antirretrovirales sobre la barra- ¡Esto tampoco! -gritó tratando de quitar los antirretrovirales de la barra, pero Franco los tomó antes-
–¿Qué es esto? -preguntó Franco con confusión-
–¡Dámelo! -ordenó Mau-
–¿Estás en drogas? -preguntó Franco observando el frasco de los antirretrovirales-
–¡Regrésamelo! -dijo Mau alterado-
–¿Antirretrovirales para el sida? -preguntó Roberta desconcertada después de leer la nota de la farmacia-
–Oh -musitó Franco-

Aidan Gallagher, ¿mi verdadero amor? (Aidan y tú) [2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora