Capitulo 8

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Mi primera noche y mi primer despertar aquí han sido espectaculares, sobretodo porque son las tres de la tarde y Diego no a venido. Seguro estará estrenando la piscina o corriendo por el jardín.

Al fin llega la noche y yo ya estoy lista para la cena y sobretodo la fiesta que me espera esta noche.

Según hablé con Alex habrá un fiestón en casa de un amigo suyo y que estamos invitados todos los que quieran ir.

— El otro día dije que te vistieras mejor, pero no me refería a que muestres el 80% de carne –habla papá.

— A mi me gusta mi vestido.

Estamos saliendo de casa para cruzar a la de al lado y debo admitir que tengo muchas ganas de ver a Izan, es tonto que diga esto después de haber hecho tremenda burrada en la playa pero bueno.

— ¿Porque no te llevas a Izan? – me dice John.

— No– contesto enseguida, hoy es mi noche y no quiero distracciones como el.

Sigue insistiendo pero mi respuesta es un no.

La única excusa que le pude poner para que dejara de insistir, fue que era noche de hermanos. O ese es el plan, porque una vez que meta un pie en esa casa no se que será de mi, de todas maneras para eso estará Aaron, para cuidar de mi y Aylen. Llegamos a ser muy peligrosas cuando vamos con unos tragos de más.

Una vez, nos invitaron a un chalet a una fiesta privada. La pasamos tan bien que no recordamos nada de esa noche, tanto así que amanecimos en unos bancos a unas cuantas cuadras de la casa de Aylen. Supongo que íbamos tan pedo que nos quedamos dormidas a medio camino, ahora me da risa y lo veo como una anécdota graciosa para recordar toda la vida, pero podría habernos pasado algo.

Esta claro que juntas somos un peligro.

Hablando de la reina de roma...

Aylen Última hora, tu admirador no secreto se apunta a la diversión.

Mientras no se ponga pesado todo perfecto.

En todo el rato que llevamos en casa de Izan el susodicho no me a saludado ni mirado ni una sola vez, se supone que todos los días me escribe aunque no obtenga respuesta. Y ahora que lo pienso hoy no me ha escrito y se ve de la misma forma que yo, ignorando al otro.

Estamos en el salón de visitas, desesperados por que sean a las diez en punto para que nos vengan a recoger. De mientras estoy escribiéndome con mi mejor amiga, ayudándola a elegir que ponerse.

Aylen es la chica mas lenta que puedes conocer, siempre tarda mas de una hora solo en escoger que ponerse sin agregar el maquillaje y peinado, por eso siempre la aviso cuatro horas antes.

Aylen Listo. En cinco minutos estamos.

No puedo responder porque me llega otro mensaje, que aunque me cueste admitir esperaba des de hace rato.

Izan ¿Donde vas tan bonita?

Y sin querer me sale una sonrisa que rápidamente escondo, pues lo tengo justo en frente. Aunque creo que no me sirvió de mucho porque me esta mirando con una sonrisa de oreja a oreja.

Por dios, que sexy.

— Hermanitos– llamo su atención levantándome y bajando un poco mi apretado vestido. –Llegó la hora– ellos se levantan de un salto. – Ha sido un placer, adiós.

Por primera vezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora