Capítulo 14 (LOS GATOS NEGROS DAN MALA SUERTE)

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—No deberíamos perder más tiempo, deberíamos ir ya directos al Jet.

Digo después de que todos hayamos estado de acuerdo en no contar absolutamente nada de lo que ha pasado con ese niño en esta terminal.

Sam y Bucky asienten ante mis palabras, y con la mirada rápida, buscamos una salida a la pista de vuelo para volver a salir y ya dirigirnos directamente a nuestro destino.

Bucky es quien la encuentra, y no le hace falta decir nada, ya que nosotros le seguimos en cuanto sale corriendo en su dirección.

Una vez cruzada la puerta, volvemos a aparecer en el improvisado campo de batalla en el aeropuerto, y tan sólo me tomó unas milésimas de segundo para analizar el ambiente:
Todos siguen peleando.

El hombre hormiga está jugando con su tamaño creciendo hasta alcanzar el tamaño contrario al de una hormiga, mientras intenta distraer al resto de participantes en la batalla.

Wanda intenta detener a Visión pero sin ninguna intención de hacerle daño, tan sólo deteniendole sin siquiera rozarle con sus ataques.

Clint intenta manejarse con máquina de guerra, pero también prestando atención a Wanda, como si de una hija para él se tratara.

Y por último, Steve esta enfrentándose a Tony, como no, ambos peleando intensamente...

No me puedo permitir pasar más tiempo observando el panorama, tenemos que llegar al Jet y no ser interrumpidos por ninguno de ellos. Para eso debemos entrar en el juego y hacer que la acción comience para nosotros.

—Yo puedo volar —nos recuerda Sam para después seguir informándonos—, me encaró de máquina de guerra.

Bucky y yo asentimos, y Sam se separa de nosotros, pero antes de entrar al juego se gira para dirigirnos unas últimas palabras:

—No me esperéis.

No hace falta que diga nada más, sabemos a qué se refiere y en cierta manera tiene razón, si tenemos la oportunidad no la podemos desperdiciar esperando a alguien, aquí lo que importa es que lleguen Steve y Bucky, y si hay que quedarse por el camino, una se queda.

—¿Alguna preferencia?

Me pregunta Bucky posiblemente para dividirnos el trabajo en la pista de juego.

Me giro para mirarle brevemente y encuentro a mi perfecto adversario lanzándose contra nosotros.

—Me gustan los gatitos.

Y justo antes de que caiga sobre nosotros, uso a Bucky para impulsar e contra T'Challa y así detener e impedir su ataque, y mientras estoy en el aire, decido también empezar mi propia fiesta de disfraces.

«Pantera blanca»

Caemos ambos al suelo vestidos de la misma manera, a excepción del color, ya que su traje sigue negro, pero el mío es blanco.

—Me dijeron que podías copiar cosas, pero esta vez te ha salido mal —rara vez me sale algo mal—. Mi traje es negro, no blanco. ¿Eres daltónica?

Una media sonrisa se dibuja en mí cara.

—¿Nunca te dijeron que los gatos negros dan mala suerte?

Nunca he sido supersticiosa ni creo en nada de eso, no creo que pasar debajo de una escalera te de mala suerte, o que abrir un paraguas en un sitio cerrado de mala suerte, y menos todavía que ver un gato negro de mala suerte. Pero lo que dice la gente es lo que la gente dice, y está era una buena ocasión para usar ese argumento.

Incluso con la máscara puedo ver como aprieta los dientes y se le tensa la mandíbula, y empiezo a fijarme en todos y cada uno de los movimientos que empieza a realizar, prestando atención al más mínimo de ellos para saber si va a empezar a atacar, y en el caso de que así sea, cuando será.

Nueva Vengadora / Civil WarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora