Always

20. Me volverás loco.

                             

Natasha abrió los con lentitud, de inmediato una luz blanca y radiante la cegó, aumentando la migraña que tenía, se quejó y cerró los ojos con fuerza.

-Ahg, como duele.....-. Susurro y miro su mano, había unos dedos entrelazados a ella acariciándola con levedad.-. ¿Qué?.-. Abrió la boca con sorpresa al ver a esa persona sentada junto a ella.-. ¿Bruce?.

-Sí, soy yo.-. Respondió mientras la miraba con seriedad algo que ella ignoro por completo.

Lo abrazo con fuerza, abrazo que Bruce no le correspondió.-. No puedo creer que estés aquí.-. Lo miro sonriente e iba a besarlo pero Bruce la detuvo.-. ¿Qué pasa?.-. Pregunto confundida por su actitud.

-Eso quiero saber yo, Natalia.-. Nat trago saliva al escuchar la seriedad y el enojo en su tono de voz, todo eso junto a "Natalia" Le aterraba.-. ¿Qué sucede contigo? ¿Por qué estuviste una semana entera sin comer? ¿Qué te ocurre? Pudiste haber muerto.

-Te enteraste de eso, entonces.-.

-Por supuesto que me entere, Natalia.-. Exclamo enojado y empezó a caminar por la habitación con las manos en la cabeza.-. Por esto no quería que vinieras aquí, sabía que algo malo iba a pasarte, y yo iba a enloquecer y terminaría aquí, cuidándote o llorando sobre tu cadáver.....-.

-Bruce, nada malo me paso estoy bien....-.

La interrumpio.-. ¿Nada malo?.-. Camino hacia ella y la miro enojado.-. ¡Nada malo! ¡Natasha, estuviste cuatro días inconsciente...!

Lo interrumpio.-. ¡Me estas gritando, Bruce!.

Suspiro.-. Lo siento, lo siento...Es solo que...-. Suspiro y se sentó para luego meter las manos en su cabello.

-Bruce, ¿Estas bien?.-.

-Vas a volverme loco, Natasha.-. Dio un largo suspiro mientras pasaba las manos por su cabello frustrado, Nat rio.-. ¿De qué te ríes?.-. Le pregunto serio.-. No me parece nada divertido lo que hiciste, Natalia Alinovna...-. Hablo con seriedad mientras se levantaba.

Lo interrumpio.-. No.-. Lo miro amenazante.-. No continúes esa oración, o esta vez no te terminare, te abofeteare.

-¿Qué tipo de fetiche tienes con las bofetadas, Nat?.-. Pregunto.

Lo golpeo en el brazo levemente.-. Tonto.-. Agrego con una sonrisa.

-¿Por qué lo hiciste? ¿Por qué aceptaste? Pudiste haber muerto, Nat.-. La tomo del rostro y acaricio su mejilla.-. Estas más pálida, y más delgada. No debiste dejar de comer, no debiste hacerlo, tienes que comer, Natasha...Te pedí que te cuidaras, ¿Por qué no lo hiciste?.

-Creí que no me iba a pasar nada. Me sentía muy bien, en serio, no sé qué paso.-. Se encogió de hombros.-. Lamento haberte asustado.

-Casi me matas de los nervios.-. Confeso y estrecho a la espía contra su pecho, y acaricio su cabello rojo.

-Estoy bien, tranquilo...-.

-No, no estás bien.-. La miro y negó.-. Estas increíblemente loca.

Rio.-. Sí, pero así me amas ¿O no?.-. Arqueo una ceja.

-Amaría que no intentaras matarme de los nervios cada vez que tienes la oportunidad.-. Suspiro y beso su frente.

-Eres muy dramático.-.

-Sí, pero así me amas ¿O no?.-. Arqueo una ceja mirándola.

-Claro que te amo, pero amaría que me dieras un beso justo ahora, hace un momento me rechazaste. No lo harás otra vez ¿O sí?.-. Juntaron sus frentes.