|| Afterglow || BF x Pico

|TREINTA Y NUEVE|

|39| Aftherglow| Este es el fin: parte 1

Había pasado un mes desde aquella noche, junio parecía ser algo tranquilo para la pareja...o al menos eso crían.

Keith cada vez empeoraba, fuera de que no se sentía merecedor del amor de su novio o amigos en el trabajo comenzaron a surgir rumores con respecto a la cirujana quien parecía disfruta su tiempo con el jefe de bomberos. Aunque la frase:

<<"Pico es un buen hombre no me haría daño">>

Era su ancla. Sabía con exactitud que su amado no le haría daño, aunque él también era humano cometía errores. Como el de no saber que su novio sufría al verlo hablar con la pelinegra.

Cassette o Cass como preferían que la llamasen parecía muy interesada en su relación, aunque realmente nunca se dirigieron la palabra. Ella siempre estaba presente cuando Pico lo recogía de su trabajo. Ella salía siempre primero para hablar por un momento con el pelirrojo, quien platicaba como si fueran amigos y antes que se fuera al momento que lo miraba acercarse, ella solo le dedicaba una sonrisa mañosa para después subir a su motocicleta e irse dejando a un celoso Keith que no se atrevía a reclamarle nada a su novio.

No lo culpaba, tanto él como Pico tenían amigas del sexo femenino pero había algo en la cirujana que no le daba buena espina.

[...]

–Una gran mujer como ella merece un bien hombre –hablo la jefa de enfermeras mientras comían en su hora de descanso.

Keith arqueo su ceja, disgustado con lo que dijo su jefa. No estaba muy lejos de ella, cosa le irritaba cada vez que salían a comer, ella siempre decía que había algo entre el sexy bombero y la cirujana adapta a tabaco.

–¿Pero él no sale con alguien? –pregunto una de las enfermeras.

<<Claro que sale con alguien>> pensó en sus adentros.

–No creo, el siempre que viene a urgencias después de un incendio se ve reservado y serio –hablo otra enfermera de mayor edad– nunca le vi un anillo o su pareja para llevarlo a casa.

–El bombero merece alguien igual que él como la cirujana. Ambos harían una perfecta pareja.

Sin darse cuenta que por la molestia termino aplastando su almuerzo, molesto dejo caer su destruido emparedado a su bandeja. Como en esos momentos odiaba a sus compañeros.

Miro con asco lo que antes era su almuerzo, gruño y molesto se levantó de su asiento, tomando la bandeja fue directo al basurero, pero termino parado al escuchar a cierta mujer:

–También creo que haríamos una hermosa pareja –hablo aquella hermosa mujer fingiendo una tristeza– lástima que él no se anima.

Miro de reojo al peli teñido, una sonrisa pícara apareció en sus gruesos labios, cuales sostenían uno de sus apreciados cigarros. Keith la miro con odio, cosa que provoco que ella soltara una risa complacida.

–Oh señorita Cass, no sabíamos que estaba aquí, discúlpenos.

–Está bien –dijo sin mucho interés, le dio una calada de su cigarro para después soltar el humo frente a ellas– pero no rumoreen eso de cosa, podrían pagar caro –amenazo mirando con seriedad a la jefa de enfermeras quien trago saliva al sentirse amenazada.

–Lo siento, no volverá a pasar –se disculpó la mayor agachando su cabeza con arrepentimiento.

–Como sea, ustedes me aburren y no les deberían importar con quien me acuesto o salgo.

Fue lo último que dijo para después apagar su cigarro en el cenicero de la mesa. Les dedico una última mirada, llena de desprecio al mismo tiempo que mostraba una indiferencia que lograba intimidar aquellas mujeres que claramente eran de mayor de edad.